SALTA (Redacción) – Desde que Javier Milei había asumido como presidente de la Nación, la expresidenta Cristina Kirchner prácticamente no había emitido ningún tipo de comentario. Sin embargo, hoy 14 de febrero, Día de los Enamorados, reapareció con un carta de 32 páginas donde analiza el programa del Gobierno actual, anticipa que el país va rumbo a la dolarización y extranjerización de su economía.
«Argentina en su tercera crisis de deuda. Cuadro de situación» es el título del documento. Por lo tanto, se enfocará a observar los problemas de la economía interna con los asuntos externos irresueltos. En primer lugar, contradice la voz oficial descartando que el problema sea el déficit fiscal como razón central de la inflación. Por el contrario, para Cristina Kirchner «la inflación en Argentina se dispara ante la escasez de dólares«.
Es decir, «el endeudamiento compulsivo en dicha moneda no hace más que agravar dicha escasez al profundizar la ya conocida y estructural restricción externa de
nuestra economía bi-monetaria». De este modo, Fernández de Kirchner repasa brevemente los anteriores ciclos de endeudamiento hasta llegar a la presidencia de Mauricio Macri.
Javier Milei es un showman-economista en la Rosada
Luego, la expresidenta de la Nación manifestó que Javier Milei es un showman-economista, lo cual le permitió -por muchas razones más, lógicamente- catapultarse en la presidencia. En lo que respecta a la Ley Ómnibus y el DNU, dichos instrumentos «constituyen un paquete de modificaciones del sistema legal argentino a medida de los principales grupos empresarios y lo que es más grave aún, una reforma encubierta de la Constitución Nacional«, advirtió Cristina Kirchner.
A diferencia de lo que hacen muchos de los que tienen afinidad política con ella, aclaró que «no es la cuarta experiencia neoliberal». Es algo totalmente diferente, desconocido y un fenómeno que los argentinos nunca vivimos. «El nuevo gobierno sólo ha desplegado un feroz programa de ajuste«, señaló Kirchner. Todo esto sin planes compensadores ante la pérdida sufrida por los asalariados y los más postergados.
Yendo más a fondo, la vicepresidenta (MC) remarcó que se trata de «un verdadero plan de desestabilización y que no solo retroalimenta el espiral inflacionario colocando a la sociedad al borde del shock«. Lo que es más grave aún es que «provocará irremediablemente el aumento de la desocupación y la desesperación social en una suerte de caos planificado». A modo de cierre de la primera parte, advirtió que «es más que evidente que en la cabeza del Presidente el único plan de
estabilización es el de la dolarización. No se explican las medidas adoptadas en otro marco teórico».
El último punto a destacar de la carta de Cristina Kirchner es su alerta sobre el peligro de que Argentina sea un país tierra de nadie. Por eso, remarcó que si el DNU no es derogado, Argentina ingresaría inerme a un proceso de extranjerización irreversible en un siglo XXI que se caracterizará por la disputa del dominio sobre la tierra, el agua y los recursos naturales».