SALTA (Redacción) – En un país donde está todo por hacerse, suspender la obra pública termina significando un duro golpe al sueño de muchos salteños en tener algunos servicios básicos fundamentales garantizados. María del Socorro López, presidente de la Comisión a cargo de esta área en la Cámara de Diputados, advirtió que fue un error su paralización.
Hasta hace poco se había avanzado fuertemente en diferentes planes de infraestructura y/o construcciones de vivienda. Sin embargo, ahora todo eso ya no ocurre y la obra pública financiada por Nación está prácticamente paralizada. Socorro López, diputada por el departamento Chicoana destacó que «veníamos de una gestión importante en materia de obras públicas, fue histórica la cantidad de obras que se hicieron».
Frente a este nuevo panorama, para muchos municipios es una gran preocupación que Nación haya paralizado la obra pública en Salta y el resto del país. Todo esto trae aparejado un aumento de la mano de obra desocupada impactando de manera negativa sobre la calidad de vida de los ciudadanos. «Van a quedar 2000 viviendas sin financiar, por ejemplo», aclaró López.
Una oportunidad desperdiciada
A su vez, la diputada provincial remarcó que este era el momento ideal para avanzar con nuevas trabajos y fortalecer la obra pública en general. Actualmente se requieren de nuevos hospitales, arreglar y mejorar la condición de los ya existentes al igual que con las instituciones educativas.
En fin, la legisladora manifestó su preocupación por la situación. «Confiamos en que esto sea solo un tiempo; la obra pública significa desarrollo«, sostuvo Del Socorro López. También reconoció que sería positiva la participación de empresas privadas. «Creo que las crisis hacen que uno haga uso del ingenio, para mí la obra pública no se debería haber parado, sí se debió reforzar los sistemas de control sobre ella», enfatizó.