SALTA (Redacción) – Un estremecedor episodio de violencia se produjo anoche en las calles de la ciudad de Salta. Un grupo de rugbiers atacaron al hijo de Roberto Gramajo en un boliche de la capital. Precisamente, el «Profe» denunció este hecho a través de las redes sociales. De esa manera, aseguró que los agresores «lo patotearon y patearon en el piso«. En tanto, indicó que el joven todavía permanece internado en el Hospital San Bernardo, donde le están realizando exámenes de salud.
Según expuso Gramajo por medio de su cuenta de Facebook, este terrible incidente aconteció anoche en un establecimiento de la ciudad. Incluso, ratificó que su hijo nunca había participado de alguna clase de altercados. Sin haber proporcionado mayores precisiones, infirió que este grupo de jugadores de rugby locales comenzaron a provocarlo dentro de este espacio. A su vez, sugirió que estas acciones súbitamente derivaron en golpes, aún cuando el muchacho ya estaba en el piso.
Tras este cobarde acontecimiento, el joven debió ser trasladado hacia el hospital. Ante ello, el «Profe» refirió que los médicos desde hace horas están examinando su estado, a fin de descartar mayores complicaciones. En tanto, redactó el siguiente texto en las redes sociales: «La violencia de rugbiers no solo es en Villa Gessel. En 24 años mi hijo nunca tuvo un incidente. Hoy en un boliche lo patotearon y patearon en el piso. Ahora en el san bernardo. La policía no pudo identificar a nadie, como casi siempre. Ahora esperando tomografía del cerebro».
Violencia rugbier
El asesinato de Fernando Báez Sosa en la localidad de Villa Gesell despertó el alerta sobre el violentos comportamiento que poseen algunos grupos de rugbiers. Al respecto, el presidente de la Unión de Rugby de Salta, Carlos Martearena, repudió ante este episodio. En diálogo exclusivo con SALTA4400, aseguró que la entidad está «en contra de todo lo que ha pasado». Lo que hicieron estos chicos es un crimen espantoso, aberrante y la verdad que estamos consternados y apoyando a la familia de Fernando», afirmó.
Al mismo tiempo, Martearena defendió al deporte ante las críticas que ha efectuado gran parte de la sociedad argentina. «El rugby es el mismo en todos lados. Los valores se inculcan, y los entrenadores siempre inculcan el no a la violencia», remarcó. Al mismo tiempo, aseveró que uno de los principales objetivos que persigue es «formar buenas personas antes que buenos deportistas». Ante ello, admitió que «como en todo sector de la sociedad hay gente que es violenta, y evidentemente estos chicos eran violentos».