SALTA (Redacción) – En su paso por la Provincia, el titular del ministerio de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo, lamentó la situación que atraviesan los habitantes del norte de Salta. En esa línea, exclamó: «No puede haber hambre en Argentina«. Al mismo tiempo, expresó un duro diagnóstico sobre la realidad que pudo observar en el Departamento San Martín. Además, el dirigente explicó cómo se aplicarán las políticas públicas que apuntan a acabar con la desnutrición y la deshidratación.
En conferencia de prensa, Arroyo transmitió su pesar «por el fallecimiento de los niños en los últimos días». Ante ello, contó que había recorrido «el paraje de La Puntana junto con el Gobernador Gustavo Sáenz«, donde mantuvo conversaciones con «las familias de la comunidad». De esa manera, ratificó que «verdaderamente Argentina tiene una situación crítica». «No puede pasar que niños fallezcan en un contexto social complicado», lamentó. En nombre del Presidente Alberto Fernández, se comprometió a «trabajar en conjunto con la Provincia para mejorar la situación».
Acerca de las problemáticas que afectan a los salteños, el ministro mencionó que «el agua contaminada, en mal estado, termina generando dificultades para los chicos». A su vez, expuso que estas complicaciones «se traducen en desnutrición, en dificultades de salud y problemas alimentarios». A fin cubrir con las urgencias, anunció que entregarán «módulos alimentarios a las comunidades aborígenes, en particular de Santa Victoria Este». Además, adelantó que también proveerán «agua envasada para atender el serio problema» que existe en la zona.
Emergencia y medidas complementarias
Sin embargo, Arroyo advirtió que estas medidas «no cambian la situación estructural», sino que se impulsaron para «atender la emergencia». Por ese motivo, garantizó que al mismo tiempo también están abocados a la gestión sobre «la emergencia estructural». De esa manera, valoró que los funcionarios provinciales de Desarrollo Social se ocuparán de «recorrer los parajes» salteños. En este orden, ponderó que las áreas de ambos gobierno estarán abocadas a brindar una solución al faltante de agua potable.
En relación a la tarjeta AlimentAr, el funcionario mencionó que se aplicación en la Provincia persigue «tres objetivos». De esa manera, formuló que en principio se buscará «resolver el problema del hambre y la mal nutrición». «En febrero las familias salteñas van a recibir la tarjeta. Antes de obtenerla, van a hacer dos cursos, uno de buena nutrición», formuló. Ante ello, valoró que promueva el consumo de «leches, carnes, frutas y verduras». Incluso, aludió que «la tarjeta codifica qué productos se compran».
En segundo lugar, Arroyo recalcó que esta propuesta busca «priorizar a los chicos«. «Por eso la tarjeta es para los menores de 6 años», añadió. Al mismo tiempo, enfatizó en que «este es un plan de empleo», ya que afirmó que sirve para «fomentar la agricultura familiar y la economía popular». «Hay un montón de gente que produce a pequeña escala que va a tener la posibilidad de vender los productos que tienen sus granjas o huertas», señaló. En tanto, el ministro sostuvo que la tercera finalidad serán «trabajar muy articuladamente entre la Nación y la Provincia para llegar a las comunidades que se encuentran en situaciones más críticas». «Tenemos el compromiso de resolver los problemas más graves de la Argentina, que son el hambre y los chicos con mala nutrición», concluyó.
