SALTA (Redacción) – La crisis económica se hace sentir. Mucho se hablo acerca de los efectos colaterales de la pandemia de Coronavirus. La economía fue la primera puerta de debate que se instaló. El dilema entre salud y economía, aún es motivo de discusiones entre diferentes sectores sociales. Lo cierto es que aquello que todavía parecía lejano, ya se hace sentir con más fuerza. En este marco, la aerolínea LATAM, cierra sus puertas en Argentina y desvincularán a 1.700 empleados.
En las últimas horas, se conoció que la empresa chilena «Latam«, con vuelos de cabotaje en Argentina, presentará hoy un proceso preventivo de crisis en el ministerio de Trabajo. De esta manera, se intentaría discutir cómo desvinculará a los trabajadores. En términos formales, se trataría de un “proceso preventivo de crisis (PPC)”. El mismo, surge en medio de un contexto en el que las empresas no pueden echar a sus empleados.
De todas maneras, subrayaron que la empresa ofrecerá soluciones de viajes para todos los pasajeros, que incluyen devoluciones de tickets y otras acciones.
Cabe recordar que se trata de la segunda compañía del mercado de cabotaje local, después de Aerolíneas. La misma ya contaba bajo su haber con balances en rojo durante varios años desde que opera en el país. Además, la misma no pudo realizar más vuelos desde el pasado 20 de marzo, fecha en la que se oficializó el aislamiento obligatorio. A nivel local la empresa volaba a Buenos Aires, Iguazú, Bariloche, Salta, Tucumán, Mendoza, Córdoba, Neuquén, Comodoro Rivadavia, Río Gallegos, El Calafate y Ushuaia.
¿Crónica de una muerte anunciada?
Se supo que la empresa ya había intentado reducir salarios al 50 por ciento de su personal y otras medidas como las suspensiones, las cuales no fueron aceptadas por los gremios ni el Gobierno. Sin embargo, en el durante, hizo vuelos de repatriación para 16.000 argentinos. ”Hubo seis reuniones y no pudieron resolver el tema. Los obligaron a pagar el 100%, pero no lo hicieron porque presentaron un recurso administrativo”, detallaron referentes de la industria.
Si bien la mitad de los empleados aceptó la reducción salarial por medio de acuerdos individuales, pasó lo peor y lo menos esperado. La decisión se tomó en medio del brutal impacto que la pandemia tuvo en el sector aerocomercial e involucra a los 12 destinos domésticos que la empresa hacía en el país, 3 regionales y uno internacional.
Paralelamente, en Chile consideran que la transformación de la industria a nivel global será enorme luego de la pandemia y que no habrá recuperación en, al menos, tres años. Así, el contexto local es más que complicado para pensar en esa renovación. A pesar de ello, las rutas a Santiago de Chile, Brasil y Perú se mantendrán y serán operadas por las empresas de esos países.
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