SALTA (Redacción) – Si bien varias causas judiciales contra Cristina Kirchner habían sido disueltas y se había dejado de investigar, la que sigue sin darle paz a la vicepresidenta es la Causa de los Cuadernos en la cual se la acusa de ser jefa de una asociación ilícita. En las últimas horas la Cámara Federal de Casación llegó a la resolución de dejar firme el procesamiento contra la expresidenta.
Además, de ser considera jefa de una asociación ilícita está capitulada como coautora de 27 hechos de cohecho pasivos, lo que quiere decir en otras palabras, que Cristina Kirchner habría aceptado dinero por parte de un particular. De esta manera, el tribunal de mayor importancia nacional, a través de una votación dividida, reconoció que el procesamiento iniciado por el fallecido Juez Bonadío y que también había sido rectificado por la Cámara Federal «no se trata de una sentencia definitiva ni de un auto que ponga fin a la acción, a la pena o haga imposible que continúen las actuaciones».
En este sentido, se aclaró también que : «en la presente, han recaído pronunciamientos concordantes del juez instructor y de la cámara respectiva, sin que se observe la existencia de cuestión federal o verificación de un supuesto de arbitrariedad en el pronunciamiento recurrido, que amerite la intervención de esta Cámara como tribunal intermedio», en la causa que más pesa sobre Cristina Kirchner.
A esto, por otro lado, se le sumó que «la impugnación intentada sólo revela una disconformidad con la desestimación dispuesta, que no es suficiente para configurar un supuesto de arbitrariedad o cuestión federal que autorice la apertura de esta instancia casatoria», detallaron respecto a la Causa de los Cuadernos donde se revelan maniobras de enriquecimiento ilícito de la familia presidencial entre el 2003 y el 2015.
No sólo esto agrava el panorama de la expresidente sino las declaraciones de quien fuera su contador, Víctor Manzanares, manifestó estar arrepentido «de las decisiones que tomé en su momento para llegar donde llegué», en referencia a su vinculación con el matrimonio Kirchner. Alejado de toda función pública, aseguró: «Hoy estoy muy tranquilo, en familia» y concluyó contando que «no tengo actividad profesional, es parte de las consecuencias de los actos de mi parte», finalizó.
