SALTA (Redacción) – Carlos Pedro Blaquier, uno de los empresarios más importantes de la Argentina, falleció este lunes a sus 95 años. El máximo accionista del Grupo Ledesma murió en la Ciudad de Buenos Aires dejando un enorme legado en el norte argentino al comandar la empresa más grande de la región durante más de cuatro décadas.
Casado con Nelly Arrieta Wollmann, con quien tuvo cinco hijos y se separó en la década del ’80, Carlos Pedro Blaquier se convirtió en titular de la empresa Ledesma en 1970. En ese entonces reemplazó a su suegro, el empresario Herminio Arrieta, de quien siempre valoró las «bases sólidas» que dejó en la compañía.
Bajo su conducción se produjo un enorme crecimiento del Grupo Ledesma. Es que a la producción de azúcar y papel, que actualmente también constituyen su principal fuerte, la empresa le agregó actividad agropecuaria, citrícola, producción de cuadernos y repuestos escolares, jarabe de fructuosa y hasta energía, con el gas de Aguaragüe y el bioetanol.
El cambio en Jujuy
Como cabeza del grupo Ledesma, Carlos Pedro Blaquier también causó fuerte impacto en la comunidad de Jujuy donde se erige el Ingenio. La transformación fue tal que entre la década del ’60 y la del ’80 la población de la ciudad de Ledesma se multiplicó por veinte a raíz de la compañía.
De esta manera, decenas de miles de personas del norte argentino trabajaron bajo su conducción provocando elenorme crecimiento de esta compañía. Ya en 2013, diez años antes de su fallecimiento, Carlos Pedro Blaquier abandonó la cabeza de la empresa que ahora es conducida por sus herederos.
