SALTA (Redacción) – Reapareció Cristina Kirchner una semana después de que Alberto Fernández desistiera ser candidato y no buscar la reelección. Lejos de las ganas y ambiciones de sus militantes y fervientes seguidores, intentó indicar que «su hora ya pasó» y es momento de que otros tomen el bastón de mariscal. El Frente de Todos está en sus horas más oscuras y peligra su continuidad en el poder.
Consciente de esto último, la vicepresidenta ya no puso más el ojo en Juntos por el Cambio y el macrismo. No, intempestivamente cambió su eje de discurso y lo enfocó aunque sin nombrarlo en Javier Milei. Con claras referencias y críticas a la «dolarización», Cristina Kirchner rememoró a la «convertibilidad» y los efectos generados sobre la economía doméstica en los 90.
Se trató de un acto que se realizó en la ciudad de La Plata donde se lanzó una escuela de formación política. «Presidenta nada. Acá no es casualidad que la única dirigente candidata que fue condenada, proscrita e intentada de asesinar es una sola. Esos mamarrachos que andan diciendo que la casta tiene miedo… si nunca te pasó nada malo, ¿De dónde te tenemos miedo, hermano?», le respondió Kirchner a Milei y a los libertarios sin nombrarlos.
En otras palabras, recordó todo lo que estuvo viviendo desde que dejó de ser presidenta. «Fui perseguida, mis hijos, me quisieron matar, no los quieren investigar a ellos que tienen evidentes compromisos con sectores empresariales. Tengo miedo de que mis nietos crezcan en un país tan injusto e inequitativo, de eso sí, tengo miedo. Ya di lo que tenía que dar, ya viví. Temo por los jóvenes, los pibes», reconoció Cristina Kirchner.
La vicepresidenta rechazó fuertemente la dolarización de la economía
Otro gran tema sobre el cual se refirió y le dedicó una buen parte de su discurso fue para hablar sobre la dolarización. «La inflación no para con la dolarización», remarcó CFK. Para validar este planteó explicó que en Ecuador, el mejor ejemplo de dolarizar la economía, y recordó que allí no se pudo abordar eficazmente la pandemia por la falta de política monetaria. Así la vicepresidenta tomó distancia de esta postura.
«Somos un país industrial, con energía nuclear. Si vemos lo que pasa en Ecuador, la inflación no para con la dolarización. Como no emite moneda, no hay posibilidad de tener una política monetaria, como la tuvimos con el Covid-19 para hacer frente a los gastos de salud y vacunas», explicó Cristina Kirchner. A modo de síntesis, aseguró que esta medida es peor que la convertibilidad y recordó esos duros años para el país.
Antes que nada, remarcó que «la convertibilidad y la dolarización no son lo mismo. La dolarización es mucho peor. Si salimos como salimos de la convertibilidad, imagínense con la dolarización», resumió. «Nos vienen a decir que lo que fracasó años atrás hoy puede ser la solución”. “Cuando Néstor (Kirchner) asumió como Presidente, la desocupación era dos dígitos, con un 2 adelante. Con el PBI cayendo en picada. Y hoy, nos vienen a proponer exactamente lo mismo y estamos todos discutiendo lo que fracasó hace más de 20 años», concluyó.
