SALTA (Redacción) – Héctor D’Francesco se hizo eco de una nota publicada en un medio nacional donde recuerdan cuando Central Norte de Salta estuvo a punto de tener un majestuoso centro deportivo. El mismo iba a realizarse bajo la presidencia de Juan Domingo Perón, pero por el golpe de Estado que ocurrió en el 1955 el proyecto quedó trunco.
«Perón, Central y la maldita dictadura», escribió D´Franceso en la publicación donde compartió la historia del club que hoy dirige. Vale recordar que la historia del Cuervo inicia en 1921 cuando un grupo de extrabajadores del Ferrocarril Central Norte tomaron la decisión de fundar un club. La bandera y el color elegido fue el negro, en referencia de la locomotora, del humo y el polvo que había en el aire.
El hecho concreto era que el club no contaba con un estadio ni un predio donde practicar las diferentes actividades deportivas. Radicados siempre en el norte de la ciudad, fueron ganando cada vez más adherentes y socios. A partir de la década del 40 surgirá la rivalidad de Central Norte con Juventud Antoniana por la división propia de la ciudad. Además, se sumarán campañas sumamente positivas desde lo deportivo.
La posibilidad del estadio Juan Domingo Perón en Salta
En este mismo período, surgió una oportunidad histórica para el Azabache ya que no contaban con terreno propio. «No tenía terreno y utilizaba la cancha del Brete, que quedaba en Sarmiento y Necochea. Pero cuando el doctor Luis Güemes cede el terreno de la calle Entre Ríos, en el año 1954, para que se den prácticas deportivas, Central Norte queda instalado allí en un intercambio que realiza con el equipo Federación Argentina», explica un historiador.
Fue con el segundo gobierno de Perón que surgió la oportunidad histórica de que se construya un estadio de extensas dimensiones en la provincia. Fernando Cáseres, el historiador, explica que la historia de Central Norte estaba muy ligada al peronismo inicialmente por los ferrocarriles y los trabajadores. Una nota periodística de la época remarcaba la importancia de esta obra que hubiese monumental.
«Ayer en horas de la tarde tuvimos oportunidad de conversar con las principales autoridades del Club Atlético Central Norte, respecto al monumental estadio deportivo que construye al oeste de nuestra ciudad y que por las proyecciones de la obra, se constituirá en orgullo de los salteños y todo el norte argentino». El mismo iba a tener amplias tribunas, canchas de básquet también con tribunas, pileta de natación, cancha de tenis y pistas de atletismo.
Sin embargo, lo que podría haber sido una oportunidad histórica para Central Norte quedó truncado y todo el norte argentino se queda sin un estadio de grandes inmensidades para la época. El Golpe de Estado que se llevó a cabo en septiembre de 1955 paralizó totalmente la obra. La proscripción intentó borrar los rastros del peronismo de la sociedad y el club se quedó sin este gran estadio.
El Estadio Dr Luis Güemes
El historiador cierra su recorrido histórico, explicando que dentro de las proyectos anulados se encontró el estadio que era para Central. «Es claro que este proyecto hubiera cambiado totalmente la historia. Hubiera tenido Central Norte una sede de cuatro pisos, que ni siquiera hoy tiene algo similar. La infraestructura de un club incide plenamente en el desarrollo deportivo y en la autoestima. De hecho, hasta el día de hoy, la inversión en infraestructura es una materia pendiente en la provincia», sintetizó el historiador. En 1958 se inaugurará el estadio con menores dimensiones y pasará a llamarse Dr. Luis Güemes.
