SALTA (Redacción) – Uno de los peores males de nuestra sociedad es la pedofilia, casos de este crimen no dejan de salir a la luz ni un momento, cada vez más y más víctimas retoman fuerzas y denuncian hechos horrendos que les tocó vivir. Durante la semana pasada, la iglesia de Nueva York, la segunda arquidiócesis de Estados Unidos publicó una lista en la que figuran 120 sacerdotes denunciados ante la institución por abuso sexual, corrupción de menores y posesión de pornografía infantil.
Más de la mitad de los curas pedófilos de ese listado ya están muertos, exactamente 76. En los 120 están incluidos sacerdotes, obispos y diáconos, 94 de ellos fueron removidos de sus cargos y solamente 35 han sido expulsados gracias a una ardua investigación que presentaba pruebas verosímiles de los casos denunciados. Quien publicó la lista con todos los detalles junto a una carta fue el arzobispo de Nueva York, Timothy Dolan.
“A continuación se presenta una lista del clero de la Arquidiócesis de Nueva York que ha sido acusado creíblemente de abusar sexualmente de un menor o de poseer pornografía infantil”, empieza la carta que Dolan publicó y dijo que “semejante base de datos se logró materializar gracias a las denuncias de los sobrevivientes” y agregó que “todas las víctimas pueden recibir asesoramiento profesional por parte de un consejero que ellos mismos elijan y que la arquidiócesis paga por dicho asesoramiento para que cualquier víctima, sin importar la edad de la ofensa, reciba ayuda”.
Para dar tranquilidad ante tremenda información el arzobispo contó que ante una demanda que se presenta, la iglesia procede a destituir a quienes corresponda de sus funciones para poder realizar la investigación necesaria. Lamentablemente pasó que la mayoría de esa lista se perpetuó en su cargo sin siquiera ser consultados o juzgados simplemente porque las denuncias se hicieron luego de que los culpables hayan fallecido.
De igual modo, a la arquidiócesis neoyorquina le pareció importante aclarar que no significa que ante una denuncia o demanda civil inmediatamente se agrega el nombre a la lista, sino que “los casos han sido revisados por una junta creada por la iglesia para determinar si es creíble o no la queja”. Se trata de largas averiguaciones, para dar una idea, algunos de los criminales de la lista ejercían el sacerdocio desde 1908 y los más recientes lo hacían desde 1988, se trata de más de 30 años en la iglesia.
Avergonzado de este mal, Timothy Dolan se expresó: «Les escribo como una persona que se ha dado cuenta de la vergüenza que esto ha traído a la iglesia debido al abuso sexual de menores», en la carta abierta a los feligreses en la que siente pena que se haya roto «la confianza que Dios y los creyentes pusieron en ellos». Por ello en 2016 se creó el Programa Independiente de Reconciliación y Compensación para acordar cómo se indemnizaba a las víctimas de los sacerdotes.
Por último hizo un pedido responsable para encarar en conjunto este drama social, se trata de que se “denuncie de inmediato cuando tengan un fundamento de abuso contra un menor de edad, siempre ante la fiscalía de su distrito y si está relacionado con un miembro de esta arquidiócesis que acuda al Coordinador de Ayuda a Víctimas para presentar el caso”.
Efecto Dominó
Y numerosas iglesias de Norteamérica han publicado este tipo de listas contra sacerdotes, en los que se los denunciaba. Una de las más extensas y reconocidas mundialmente fue la Lista de Illinois, que tilda aproximadamente a 400 sacerdotes y personal eclesiástico, la misma fue conocida este año, el pasado 20 de marzo, además también se sumaron la iglesia de Texas y la de Oakland.
