Salta (Redacción)- La decisión de Irán de abandonar parte de sus compromisos firmados en el Acuerdo Nuclear, han profundizado aún más la riña entre los Estados Unidos y el país árabe. En este marco, durante la jornada del miércoles el gobierno norteamericano ha tomado la iniciativa de evacuar a todo el personal diplomático, que no cumpla una función determinante, de la sede de Irak, Bagdad. El país se encuentra en las inmediaciones de Irán y además es socio económico y de la Región Islamicas. La decisión del país comandado por Donald Trump ha encendido las alarmas nuevamente.
“Numerosos grupos terroristas e insurgentes están activos en Irak y atacan regularmente tanto a las fuerzas de seguridad iraquíes como a los civiles”, escribió en su comunicado el Departamento de Estado norteamericano. El mensaje cumple una función de advertencia para los viajeros que tengan como destino el país de medio oriente. De este modo lo informaba la agencia de Noticias Argentina. El conflicto parece ser cada vez mayor, remarcando que desde hace días Estados Unidos ha iniciado interminables advertencias en contra del país árabes a causa de su posición.
Dentro de sus argumentos, Estados Unidos ha emitido numerables acusaciones luego de la decisión tomada por las autoridades iraníes. Sin embargo, la acusación central de las últimas horas fue la de “planear ataques inminentes” en la región. El causante de la misma denuncia, suscita por una supuesta presencia militar por parte de Irán en la región del Golfo, quien justifica su accionar en un modo de prevención. Según las autoridades, el objetivo es reforzar la defensa del territorio nacional. Sin embargo la respuesta de Estados Unidos ha sido tomar medidas en contra de las Fuerzas Armadas árabes.
En este sentido, la medida oficializó el exilio de todos los ciudadanos norteamericanos del consulado de Erbil. “Las milicias sectarias antiestadounidenses también pueden amenazar a ciudadanos estadounidenses y compañías occidentales en todo Irak“, informaron las autoridades de acurdo al comunicado emitido por la AFP. Bajo este marco, no es la primera vez que desde el Gobierno norteamericano dan cierre a un área de carácter diplomático en territorio iraní. Durante el año pasado, se emitió la orden del consulado en la ciudad de Basora.
La decisión tomada desde el aparato de gobierno estadounidense provocó un accionar inmediato. Tal es el grado de tensión al que se ha llegado que Mike Pompeo, Jefe de Estado de los Estados Unidos, viajo a Bagdad la semana pasada. El motivo de su visita se centró “en reforzar nuestra amistad y subrayar la necesidad de que Irak proteja las instalaciones diplomáticas. Estados Unidos y las tropas de la coalición mundial están ayudando a las fuerzas de seguridad iraquíes a asegurar que ISIS siga siendo derrotado”, comunicó el mandatario en su cuenta de Twitter.
Durante la reunión emitida el pasado 8 de Mayo, Pompeo se reunió con el presidente Barham Saleh y con el primer ministro iraquí Adek Abdek Mahdi. Durante ese mismo, el Secretario de Estado norteamericano, emitió un comunicado en el cual informó sobre un comunicado en el cual se hacía referencia al anuncio en el cual Irán abanaba algunos de sus compromisos con el Acuerdo Nuclear. Este mismo había sido abandonado por los Estados Unidos hace un año atrás. Ante la posible tensión nuclar, el mandatario norteamericano ya había informado desde Rusia que “no contempla una guerra con Irán”. Sin embargo, advirtió que mantendrá la presión y las sanciones.
“El régimen iraní tiene la intención de ampliar su programa nuclear, esto es un desafío a las normas internacionales y es un intento flagrante de mantener al mundo como rehén. Pedimos a la comunidad internacional que responsabilice al régimen de Irán por su amenaza de expandir su programa nuclear”, señaló en su Twitter. Durante la semana Pompeo se había reunido con el ministro de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, y el presidente Vladimir Putin, en donde trataron la temática y el conflicto que se vive actualmente en Venezuela.
