SALTA (Redacción) – El último día del 2019 comenzó con serios hechos de violencia en Bagdad, capital de Irák, donde miles de manifestantes ingresaron a la fuerza en la Embajada de Estados Unidos. “Una multitud de iraquíes protestan en la embajada estadounidense tras los bombardeos”, consigna la agencia AFP. Ante este insólito episodio, el ministro local instó a las personas “a retirarse de las inmediaciones del lugar”.
Invadieron la embajada y les respondieron con gases
Este suceso es el primero en muchos años, ya que no es habitual que manifestantes ataquen violentamente la sede diplomática estadounidense. La embajada esta ubicada en la capital y en una zona muy protegida y controlada, la cual es conocida como Zona Verde, por la existencia de varias embajadas y edificios del Gobierno Local. De igual manera se produjo, según las autoridades locales, son “varios miles de personas las que se hicieron presentes en el lugar”.
En tanto, de acuerdo a las primeras informaciones, una gran cantidad de personas tenía uniformes militares, otras estaban de civiles y había muchas mujeres. Todos comenzaron a pasar los controles oficiales sin demasiada reacción de las fuerzas de seguridad iraquíes. Mientras se acercaban a la embajada, comenzaron a arrojar piedras, arrancar cámaras de seguridad y quemar cabinas y torres de vigilancia. Desde la sede diplomática respondieron con gases lacrimógenos.
Destrozos y protesta por los ataques aéreos de EE.UU.
Al mismo tiempo, se detonaron bombas de estruendo y difundieron mensajes por megáfonos para que se alejaran de la propiedad internacional. Sin embargo, estas medidas no surtieron efecto. Según detalla la agencia Télam, la mayoría de las personas se identificaba con banderas de Hashed al Shaabi, unaa fuerza apoyada por Irán y conformada por milicias progubernamentales mayormente de religión chiita.
Por último, cabe mencionar que el domingo pasado, como bien informó Salta4400, varios ataques aéreos de los Estados Unidos contra bases en el oeste del país árabe provocaron la muerte de 25 combatientes de una de las Brigadas Hezbollah. Hasta esta fecha, el país norteamericano mantiene más de 5 mil soldados desplegados en todo Irak para entrenar a las fuerzas locales y reprimir el resurgimiento del Estado Islámico.