El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no quiere decretar una cuarentena total y obligatoria por la pandemia. Y al mismo tiempo, el coronavirus está cada vez más presente en el territorio norteamericano. Hasta el momento ya se registraron 14.600 casos confirmados y hay 210 víctimas fatales. Sin embargo, el mandatario descartó por el momento la medida drástica y aseguró: “No creo que algún día consideremos necesario”. Cabe recordar que anteriormente tuvo que contradecir sus declaraciones para tomar medidas para combatir la enfermedad respiratoria.
Cuarentena solo en “puntos calientes” de EE.UU.
“Eso se hizo en los dos puntos calientes, como California y Nueva York. Pero si pones tu mirada en el Oeste u otra zona, ellos están siguiendo el tema por televisión, no tienen los mismos inconvenientes”, argumentó el republicano sobre su postura. En tanto, la zona neoyorkina es, por lejos, el Estado más afectado. Ya que tiene casi la mitad de los infectados totales en el país (7.102). El gobernador Andrew Cuomo hizo un dramático pedido solicitando respiradores en las últimas horas y cruzó al Jefe de Estado.
De igual manera, si bien son solo dos Estados afectados de forma crítica, entre ambos distritos suman 60 millones de personas. En lo que representa poco más de la quinta parte del total de la población del país. Además, cabe detallar que esta cuarentena neoyorkina, con los comercios no esenciales cerrados, será más restrictiva que la impuesta por las autoridades de California. Otro punto vital a tener en cuanta es que en ambos territorios gobiernan dirigentes del Partido Demócrata.
Trump baja el tono contra China
Como bien cita El Intransigente América, a pesar de este panorama, Donald Trump aseguró que en su país: “Estamos ganando la guerra”. Durante una conferencia desde la Casa Blanca, el mandatario aprovechó para hacer referencia a la tensa relación que mantiene con China y que se agudizó debido a la pandemia. Previamente, el secretario de Estado, Mike Pompeo, había acusado a la nación asiática por: “No compartir al mundo información clave”. En referencia al coronavirus surgido en Wuhan y los posibles avances en el desarrollo de un antídoto.
A pesar a referirse al COVID-19 como “el virus chino”, Trump optó por una exposición más diplomática. Por lo que bajo el tono a los dichos del funcionario Pompeo y el pedido de “transparencia”. “Considero al presidente Xi Jinping como un amigo. Realmente es una desgracia que todo esto se haya descontrolado luego de salir de China”, expresó el Jefe de Estado. En caso de mantener esta tendencia en los casos, en el corto plazo Estados Unidos será el cuarto país más afectado por el COVID-19.
