El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, desafía de forma increíble al coronavirus a pesar de las alarmantes cifras que registra el país. En esta ocasión, el titular del Ejecutivo realizó una salida a la calle en el marco de una manifestación partidaria frente al palacio Planalto, en Brasilia. Además, como agravante, lo hizo acompañado de su hija Laura, de 9 años. Ambos se mostraron sin ninguna máscara o protección sanitaria. Al mismo tiempo, enfrenta varios conflictos políticos.
La polémica acción y las graves cifras de coronavirus
En insólito episodio que se vivió este fin de semana, el Jefe de Estado brasileño no dudó en acercarse a la gente, tomar a un niño y manipular entre varias personas una bandera. Todas las recomendaciones de prevención que les dieron al Presidente son desoídas. Y se arriesgó a estar entre decenas de personas sin barbijo ni tapa boca. Como bien señala El Intransigente, Bolsonaro se expresó sobre la protesta en su cuenta en Facebook y afirmó que desea: “Una verdadera independencia de los poderes del Estado, sin interferencias”.
En este sentido, cabe recordar que la pandemia no tampoco da tregua en la región latinoamericana. Y Brasil es el país más afectado con 7.025 víctimas fatales, una cifra que alcanzó este fin de semana tras sumar 275 decesos. Mientras, los casos confirmados ya son más de 100.000, con un total de 4.598 nuevos contagiados. “Lo lamento, pero ¿qué quieren que haga?”, contestó Jair Bolsonaro cuando fue cuestionado por la prensa al alcanzar el umbral de 5.000 muertes por el coronavirus. Además, criticó a todos los gobernadores que legislaron a favor del distanciamiento social.
El caótico contexto político que enfrenta Bolsonaro
Por otra parte, el mandatario de Brasil se encuentra en el ojo del huracán no solo por la pandemia. También se lo investiga por la supuesta intervención del Poder Judicial y su intención de espiar las investigaciones contra diputados por parte del director general de la Policía Federal, Maurício Leite Valeixo. Además, la negativa y renuncia quien hasta fuera su mano derecha, el exjuez Sergio Moro, ha desatado un torbellino político en el país.
En tanto, Jair Bolsonaro también enfrenta las sospechas de haber mentido sobre los resultados de sus análisis de coronavirus. A pesar de que aseguró haber resultado negativo, más de 20 funcionarios que lo acompañaron a su viaje a Estados Unidos a inicios de años resultaron contagiados con el virus COVID-19. Ahora, la justicia le ha solicitado consignar los resultados de esos test. Finalmente, la Policía investiga a sus hijos por liderar una organización con el objetivo de difundir falsas noticias.
