SALTA (Redacción) – El príncipe Felipe, duque de Edimburgo y esposo de la Reina Isabel II durante 73 años, falleció este viernes a los 99 años. Con su centenario aproximándose, el miembro de la familia real británica falleció luego de ser hospitalizado y tras haber sido sometido a una intervención cardíaca.
La noticia se conoció a través de un comunicado emitido por la familia real británica. “Con profundo dolor, su majestad la Reina anuncia la muerte de su amado esposo, su alteza real el príncipe Felipe, duque de Edimburgo. Su alteza real falleció pacíficamente esta mañana en el Castillo de Windsor”, expresaron desde la realeza del Reino Unido.
El príncipe récord
El príncipe Felipe de Edimburgo se convirtió en 2009 en el consorte monárquico más longevo de la Corona Británica. Sus 73 años al lado de la Reina Isabel II lo hicieron superar ampliamente el récord que ostentaba Carlota, esposa de Jorge III. “Es mi roca. Ha sido mi fuerza y mi sostén”, señaló la Reina Isabel II en una de las pocas demostraciones públicas de cariño.
El fallecido miembro de la realeza británica también cuenta con otro récord particular. Es que participó en más de 22.000 actos oficiales y dominó la esfera pública en el Reino Unido durante casi 70 años. En 2017 se retiró de las actividades públicas tras sufrir el deterioro de su salud propio de su avanzada edad.
Una vida ligada a la realeza
Felipe nació en el seno de una familia real. Su padre, fue el príncipe Andrés de Grecia y Dinamarca, cuarto hijo del rey Jorge I de Grecia y Olga de Rusia, nieta del zar ruso Nicolás I. Su madre, por su parte, era la princesa Alicia de Battenberg. Producto de la inestabilidad griega, el duque de Edimburgo solo vivió en su país durante el primer año de su vida. Posteriormente, su vida transcurrió entre Francia, Alemania y Escocia, donde terminaría conociendo a la Reina Isabel II.
