SALTA (Redacción) – La guerra no parece tener una tregua en el corto plazo. Los bombardeos rusos a los corredores humanitarios dejaron 21 muertos civiles durante la jornada del lunes. En paralelo se desarrollaron las reuniones entre miembros del gobierno de Ucrania y Rusia en los que los invasores realizaron tres solicitudes para finalizar la invasión.
El Kremlin, cuya cabeza es Vladimir Putin, elevó tres pedidos para deponer las armas y retirarse de territorio ucraniano. Rusia exige que Ucrania, un país soberano, cambie su Constitución Nacional para no formar parte ni de la OTAN ni de la Unión Europea. También exige el reconocimiento de Crimea como parte de Rusia y el reconocimiento de la independencia de las “repúblicas” de Lugansk y Donetsk en el este de Ucrania.
Ante estos pedidos rusos, Mikhail Podolyak, asesor jefe de la oficina del presidente de Ucrania desestimó el ultimátum y cuestionó el accionar ruso. “Obviamente, no aceptaremos ningún ultimátum, sin importar de qué se trate”, sostuvo el funcionario del gobierno ucraniano que forma parte de las negociaciones.
“Realmente tenemos decenas de millones de ucranianos detrás de nosotros. Y es poco probable que decenas de millones de rusos estén detrás de cualquier ultimátum de Moscú. Estos son solo mitos propagandísticos. Nuestra posición es simple: las negociaciones deben ser reales y adecuadas”, remarcó.
Por último, el funcionario del gobierno de Ucrania aseguró que es inaceptable un ultimátum en medio de las negociaciones. “Esto las hará sustantivas. Y las negociaciones sustantivas no aceptan un tono de ultimátum. Cuanto antes la parte rusa esté de acuerdo con esto, menos pérdidas sufrirá, en primer lugar, la propia Rusia como resultado de esta guerra“, sentenció Mikhail Podolyak .
