POLICIALES

El Quebrachal: agredieron y amenazaron a un periodista por una investigación en contra del Gobierno local

Alex Romano fue amenazado por empleados municipales el pasado jueves.

SALTA (Redacción) – La libertad de prensa en Salta fue violentada en muchas oportunidades durante este último tiempo. Hace unos días, Alex Romano, periodista de Anta, expuso una lamentable situación que le tocó vivir tras realizar una investigación en contra de la Municipalidad de El Quebrachal. Según explicó, esta no es la primera vez que él y sus compañeros sufren este tipo de violencia.

En diálogo exclusivo con Salta 4400, el comunicador explicó que llevaban a cabo una investigación por diferentes irregularidades en el Gobierno local. Ante esto, un empleado municipal procedió a agredir al periodista. De acuerdo a sus declaraciones, esto ya sucedió anteriormente con su compañero, Néstor Pavón, quien fue agredido mientras hacía una nota en la vía pública.

«Por las situaciones que se viven en El Quebrachal, hemos recibido amenazas, un montón de cosas. Y a mí, me tocó un día fatal porque entraron a mi casa, entraron a golpearme dos tipos a cara descubierta», contó Alex. Dichas personas golpearon al comunicador con diferentes herramientas que tenía en su residencia y le advirtieron que si seguía publicando cosas del gobierno, volvería a pasar.

«Me decían que no siga publicando cosas del municipio ni de ellos en las redes sociales, porque si no me iban a golpear nuevamente. Que si denunciaba a la policía el hecho, iban a entrar durante la noche y me iban a matar», contó. A pesar de las advertencias, el periodista realizó la denuncia correspondiente ante la Policía. Aún espera la debida actuación de la Justicia, ya que los responsables siguen libres.

Lenta actuación de la Justicia

La situación de violencia que sufrió el comunicador tuvo lugar el pasado jueves, al igual que la denuncia. Sin embargo, la Justicia no le dio respuesta inmediata. «En la denuncia están puestos los nombres y apellidos de los dos agresores, domicilio de donde viven. Está todo listo para proceder a la detención y no entiendo porque no los han detenido», recriminó. Por toda esta situación tuvo que enviar a su familia a Capital por miedo. «Temo por la seguridad de ellos, de mi hijo que tiene un año, de mi esposa», finalizó.

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