SALTA (Redacción) – Este viernes se conoció la noticia de que un fiscal solicitó llevar a juicio al dueño de un bar del centro salteño. «Emitió ruidos muy altos y generó molestias a vecinos, ya que en su patio cervecero se desarrolló concursos de DJs y de bandas». Así lo explicaron desde el Ministerio Público Fiscal sobre un evento que sucedió en febrero. Además, remarcaron que se violó el distanciamiento social porque «excedieron el límite autorizado» de aforo del 30%.
De esta manera, el fiscal de la Unidad Contravencional, Santiago López Soto, requirió el juicio ante el Juzgado de Garantías 3. En su pedido apunta contra el dueño del bar, de 28 años, quien se encuentra imputado como «autor de la contravención de ruidos molestos«. También es acusado por la infracción del «artículo 13, inciso 3 de la ley 8206/20 Covid». «Por actividades autorizadas que no adopten las medidas adecuadas conforme el protocolo», completaron ante la falta de distanciamiento social.
«Ruidos muy altos y molestias a vecinos»
El requerimiento del fiscal señala que el restobar ubicado sobre calle San Luis al 600 de la Ciudad de Salta: «Emitió ruidos muy altos y generó molestias a vecinos. Ya que en su patio cervecero se desarrolló concursos de DJs y de bandas». Además, mencionaron que esta situación se constató «con el acta de infracción del 27 de febrero» que realizó el Tribunal Administrativo de Faltas 3.
«Al realizar el control, personal de la Municipalidad de Salta constató que el sonido excedió los decibeles permitidos por el artículo 94 de la Ordenanza 5941/20″ Así lo detallaron desde la Fiscalía. Por otra parte, las autoridades constataron mediante grabaciones y fotografías aportadas por personal policial la infracción al artículo de la «Ley 8206/20 Covid». «Se advirtió la presencia de gran cantidad de personas que excedieron el límite autorizado», señalaron.
Mesas muy cerca y falta de certificado de venta de alcohol
«Debe tenerse en cuenta que de acuerdo a las disposiciones del Comité Operativo de Emergencias, la capacidad se encontraba reducida al 30%», recordó el fiscal del caso. Luego completaron que se observó que «la distancia entre mesa y mesa no cumplía con la Resolución 11 del COE. La cual establece un metro y medio de separación para dar cumplimiento con el distanciamiento social«.
Por último, apuntaron que el infractor «al momento del control policial, carecía del certificado habilitante para la venta de bebidas alcohólicas al copeo». De acuerdo a la Fiscalía, todo esto: «Dejó al descubierto que la conducta desplegada por el imputado es una falta total de prudencia, interés y desaprensión ante la situación de público conocimiento, que a la fecha lleva gran cantidad de contagios y de muertes, no solo en nuestro país sino a nivel mundial».