SALTA (Redacción) – Este martes continuó el juicio contra Lautaro Teruel con la declaración de una de las víctimas que lo denunció por abuso sexual. Durante su testimonio, la joven retomó el testimonio sobre los hechos denunciados y aseguró que se iniciaron cuando ella estaba por cumplir los 10 años. Además, también reveló detalles acerca de una reunión que mantuvieron ella y su madre con Mario Teruel, padre del joven imputado.
El Poder Judicial de Salta recordó que en el juicio se abarcan dos casos. «Una de las denuncias fue radicada por la madre de I. J. A., la menor que declaró durante la audiencia de hoy, el 13 de marzo de 2019», señaló el informe. Y apuntaron que estos abusos habrían tenido lugar en la casa de Lautaro Teruel. «La segunda causa se inició por una denuncia radicada el 24 de mayo de 2019. La víctima dijo que el hecho tuvo lugar en enero o febrero de 2014, también en el inmueble de Teruel», completaron.
Volviendo al testimonio de la joven, que tiene 19 años en la actualidad, solicitó declarar sin la presencia de los imputados en la sala. Y consultada por el fiscal, relató lo ocurrido el día que se encontró con Lautaro Teruel en el Monumento a Güemes para grabarlo. Allí explicó que a ella y a su mamá se les ocurrió hacer esto para tener una prueba para poder denunciarlo. Pero aclaró que no le avisó a su madre que había pactado un encuentro con el imputado para concretar el plan.
Sobre esta situación, consultada por la defensa técnica de Teruel, la damnificada respondió que «estaba muy nerviosa porque tenía miedo de que él descubriera que lo estaba grabando». En la grabación que se reprodujo en la audiencia, el joven le comenta que cuando ocurrieron los hechos él era “pendejo”, que tenía unos 16 años. «Y ella asiente y comenta que, en su caso, tendría entre 6 y 7 años», señaló el reporte de la Justicia.
Luego, el defensor del imputado le consultó acerca de esas edades mencionadas por ambos en la grabación. Y en ese punto, la joven identificada como I. J. A. explicó que en ese momento se dio cuenta de que Lautaro se estaba bajando la edad y ella hizo lo mismo con la suya. Para seguirle la corriente porque estaba asustada y no quería contradecirlo.
Denuncias y consecuencias en la vida de la víctima
En relación a los abusos denunciados, la joven señaló se iniciaron cuando ella estaba por cumplir los 10 años. «Para asegurarlo le sirve de referencia el hecho de que en ese momento a ella la estaban cambiando de colegio y estaba por cursar el 5º grado», indicaron las autoridades. Y completaron: «Dijo que el primer abuso ocurrió antes de que empezaran las clases. Continuaron hasta antes de que cumpliera los 13 años, cuando estaba en séptimo grado».
En este punto, la damnificada refirió que antes de ser sometida sexualmente por Teruel, era una «alumna promedio», «muy sociable», pero que a partir de los abusos comenzó a tener «problemas en el colegio». “Vivía en la dirección, tenía bajo rendimiento académico y no me llevaba bien con mis compañeros. Me molestaba todo y me sentía incómoda estando con mucha gente. A los problemas los creaba yo”, contó ante el Tribunal.
Luego relató que a partir de los 10 años comenzó a autolesionarse, cortándose los brazos y piernas. «Un maestro que le vio las cicatrices le avisó a la directora y la mandaron a hablar con una psicóloga o psicopedagoga que había en la institución. Eso fue aproximadamente a mitad del cursado del quinto grado», mencionó el informe judicial.
Además, la joven señaló que a esa edad también comenzó a sufrir trastornos alimenticios y que a los 13 años le diagnosticaron bulimia y anorexia. Otro dato más grave que mencionó es que tuvo intentos de suicidio mediante cortes profundos en los brazos y la ingesta de pastillas. Por otra parte, recordó que en tercer año del secundario dejó de cursar ya que había radicado la denuncia contra Teruel y se viralizaron los audios donde le comentaba a su mamá lo que había conversado con el abogado.
Reunión con Mario Teruel
«En los medios decían que ella quería extorsionar a la familia del acusado», apuntó la joven y puntualizó: “Eso me afectó mucho. Dejé de ir al colegio porque me insultaban, se reían de mí, me decían puta y que yo me la había buscado”. Por último, podemos mencionar que contó acerca de una reunión que mantuvieron ella y su madre con Mario Teruel, padre del imputado. Dijo que ella quiso hablar con él y con su esposa para pedirles perdón por la denuncia que iba a hacer contra su hijo.
“Quería aclararles que mi problema era con Lautaro y que con ellos estaba todo bien”, precisó. Y relató que el padre del acusado se mostró enojado y que les dijo que todos los chicos “cometían esas pendejadas”. «También les advirtió que no tocaran a su familia porque él iba a salir en su defensa. La joven dijo que no recordaba exactamente todo lo que hablaron, pero sí les dijo que tenía contactos en los medios de comunicación», concluyó el reporte del caso.
