POLICIALES

Violencia de género: un luchador de MMA fue condenado y deberá usar tobillera electrónica

Mientras dure la condena, el luchador deberá fijar domicilio y notificar en caso de cambiarlo frente a un tribunal; hacer un tratamiento psicológico y no acercarse a las victimas.

Luchador detenido por violencia de género en Salta - Imagen ilustrativa

SALTA (Redacción) – Condenaron a un luchador de artes marciales mixtas (MMA) por violencia de género, que ocurrieron a partir de marzo de este año y se extendió hasta el mes de junio contra quien era su pareja. Juan Pablo Varela de 25 años es el condenado a una pena de dos años de prisión de ejecución condicional y deberá usar tobillera electrónica mientras dure la condena.

Varela fue condenado por haber perpetrado diferentes hechos de violencia de género como lesiones agravadas por la relación de pareja (tres hechos), desobediencia judicial (cuatro hechos), privación ilegítima de la libertad agravada por ser la damnificada una persona a quien se le debe respeto particular, agresión con arma impropia (dos hechos) y daños, todo en concurso real, en perjuicio de G. S.

También se le dicto la prisión por desobediencia judicial, lesiones leves agravadas por la relación de pareja previa y por el género e incumplimiento de los deberes de asistencia familiar con M.C.C., es decir, una expareja de Varela. El imputado reconoció haber cometidos los hechos por los cuales estaba siendo juzgado y estuvo a conforme con la sanción impuesta por los hechos de violencia de género contra sus exparejas.

Además de la prisión, el luchador de MMA deberá cumplir un conjunto de requisitos durante dos años como fijar domicilio y notificar en caso de cambiarlo frente a un tribunal; someterse al control del Programa de inserción social y supervisión de presos y liberados; empezar el tratamiento con un psicólogo para tratar su agresividad; someterse al Programa de Intervención con agresores de violencia de género.

Asimismo, se le prohibió acercarse a la denunciante G.S. a menos de 500 metros, no podrá establecer contacto físico ni psíquico con la misma. El juez le impuso el uso obligatorio de la tobillera y, en caso de no que haya disponibilidad de estas, las victimas puedan recibir un teléfono con la aplicación del botón antipánico del Sistema de Emergencias 911.

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