POLICIALES

Homicidio en Salta: declararon los imputados del doble crimen en Circunvalación Oeste

Todos los imputados indican al mismo responsable: Nicolás Ramos. El problema es que este último se quitó la vida en General Güemes.

Doble crimen en Circunvalación

SALTA (Redacción) – Se está llevando a cabo el proceso judicial para investigar y saber qué ocurrió con el homicidio en Salta, donde se produjo el doble crimen de Romina Zerda y Pablo Taloba. Hoy miércoles tuvieron que declarar los dos de los tres imputados ante la Justicia de Salta. Juan Brubosky y Ricardo Galarza son dos personas que están siendo investigadas en esta causa. Indicaron a Nicolás Ramos como el autor material de los asesinatos del pasado 11 de octubre.

Mientras tanto, el otro imputado, Kalil Ezequiel Chejolan, también había indicado a Ramos como el asesino de Zerda y Taloba. El hecho concreto es que a quien todos responsabilizan del doble homicidio en Salta apareció muerto en un camping de General Güemes y nada indica que haya sido un homicidio, sino por el contrario que Ramos se haya quitado la vida. Es probable que sintiéndose acorralado, haya tomado esta decisión.

Al mismo tiempo, el trasfondo del doble homicidio en Salta sería un conflicto por venta de estupefacientes, detalladamente, por drogas sintéticas que son las que se suelen comercializar en las fiestas electrónicas. Chejolan fue el primero que dio su opinión sobre lo que ocurrió y comentó que cuando ocurrió todo tenía que encontrarse con Brubosky y Ramos, ya que irían a una fiesta llamada «La Jungla».

Sin embargo, todo cambio cuando le pidió a Galarza que lo lleve pero sus amigos no estaban en ese lugar hasta que los encontraron en el costado de la Circunvalación Oeste. El testimonio de Chejolan también afirma que encontró a Ramos parado al lado del vehículo de Taloba y tenía toda la ropa llena de sangre. Contó que el principal sospechoso dijo: «Tío, me equivoqué».

Luego, Ramos les entregó una mochila y Chejolan junto a Galarza deciden irse del lugar. Un rato después, Ramos los llamó y les informó que había dos celulares adentro, a lo que procedieron a romperlos y lo arrojaron en un canal de la calle Olavarría. Ese mismo día, fueron a la fiesta pactada, consumieron estupefacientes y gozaron de la noche sin hablar de lo acontecido. Pero al otro día, todos hablando de la pareja asesinada y Chejolan decidió contar todo y colaborar con la justicia.

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