SALTA (Redacción) – La desaparición de María Cash sigue sembrando luces y sombras. Por eso mismo es que se reactivó la investigación en mano del fiscal Eduardo Villalba quien recibió nuevos informes del Cuerpo Especializado de Investigaciones. La última vez que se la vio a la diseñadora fue en el mes de julio del 2011. Aquí te compartimos detalles de las declaraciones judiciales.
Con la reactivación del caso tuvieron que declarar dos empleados de una estación de servicio. Ambos confesaron que la joven manifestó «no estoy perdida» y esa fue la última que se vio la figura de Cash. Lo que motivó al fiscal a reabrir la causa fueron la revelación de nuevos informes del cuerpo de investigaciones. Los primeros en ser citado fuero aquellos que la vieron antes de que desapareciera sin dejar rastro.
Quienes testificaron en esta ocasión fueron dos empleados de una estación de servicio que está ubicada en la rotonda del cruce de Torzalito, en General Güemes. Andres Reyes tiene 36 años y Jesús Brito que tiene 76. «En ese momento yo trabajaba para un hombre haciendo mantenimiento en la YPF. Ese día estaba pintando los troncos de unos árboles, en las rutas 34 y 9 de Torzalito, y vi a una chica que parecía estar perdida; golpeaba las puertas de los camiones, como si buscara algo o a alguien«, testificó el joven.
También recordó que «la miré y en un momento me dijo: ‘No me miren, estoy bien. No estoy perdida, no estoy drogada’, y eso fue todo. Luego, la perdí de vista«. No obstante, una semana después Reyes vio un folleto donde buscaban a la misma chica. Resultó ser que era María Cash la joven con la cual había hablado: «La estaban buscando. Yo dije: ‘Qué lo parió», expresó.
El hombre adulto relató, por su parte, que vio a la joven desaparecida. «Eran las 10 u 11. No la vi de cerca, estaba a unos 40 metros de distancia. Andaba haciendo dedo. Le habrá preguntado a unos seis o siete camioneros, pero ninguno la quería llevar. Ella tenía una mochila y un saquito», confesó sobre Cash. No obstante, no pudo ver hacia donde se dirigió la joven ya que continuó con su trabajo.
Un camionero, pieza claves del caso
Una pieza clave del caso es un camionero que la trasladó desde la rotonda de Torzalito hasta la gruta de la Difunta Correa, ubicada en la ruta 34. Fue ese hombre quien tuvo contacto cercano con Cash, sin embargo, no es la única ficha fundamental. Hay incongruencias en su relato lo cual genera alguna que otra confusión.
«Es casi imposible realizar la maniobra descrita por el camionero en ese lugar», explicó el fiscal sobre el supuesto giro que relató el camionero. Por la carga que llevaba el hombre es prácticamente imposible haya «tiempo de frenado para un camión». Todo se agrava porque otro testigo puso en duda el relato del camionero y el caso Cash seguirá en proceso de indagación.