SALTA (Redacción) – En medio de la pandemia, la causa judicial por el robo de caños en Aguaray llegó a los medios de comunicación nacionales. Por ese motivo, el titular de la Secretaría de Participación Ciudadana de Salta, Adrián Zigarán, comentó cómo se originó esta investigación. Además, lamentó el impacto negativo que este ilícito ha tenido para las localidades de la región. En ese sentido, el dirigente provincial afirmó que es «una injusticia» para los habitantes de la zona.
En declaraciones al canal TN, Zigarán comentó que durante la gestión del expresidente Mauricio Macri se había efectuado una nueva licitación del gasoducto. Ante ello, mencionó que «el tramo de Salta escandalosamente se lo adjudicó a la firma de Techint». «Era el precio más alto que había cotizado», agregó. A raíz de esta maniobra, recordó que «en esos momentos las autoridades de ENARSA renunciaron». «Pero pasan los gobiernos y sigue el escándalo», sostuvo.
Robo de caños en Aguaray
Posteriormente, el funcionario precisó que la fotografía del camión que transportaba los caños robados fue registrada «el 26 de enero a la madrugada, a la altura de San Pedro (Jujuy)». «Los lugareños me habían advertido que se estaban robando los caños. Yo vi pasar un par de camiones, porque mi trabajo hace que a pedido del Gobernador Sáenz recorra todas las zonas. Esa vez los volví a detectar, y esta foto fue casi a la 1 de la mañana», relató.
Posteriormente, Zigarán contó que llamó por teléfono al titular del Ministerio de Seguridad de Salta, Juan Manuel Pulleiro. «Me dijo que era un delito federal y que debía hacer la denuncia ENARSA o Vertua, que fue la última empresa que estuvo en la zona», pronunció. Mientras que confirmó que Raúl Vertua rápidamente se presentó ante la Justicia, aludió que no pudo contactarse con la compañía nacional. «Al día de hoy me es imposible comunicarme. Trato de saber si son querellantes en la causa, o no», expuso.
En tanto, el secretario provincial anunció que diez días más tarde se produjeron las primeras detenciones en la causa. Acerca de la obra, consideró que implicaba «un alivio» para los pobladores del norte de Salta. Además, recalcó que «construir un gasoducto de 240 kilómetros por los departamentos San Martin y Rivadavia era crear mano de obra para la gente». «Las expectativas eran altas y era una suerte de alegría», proclamó Zigarán.