SALTA (Redacción) – Esta mañana el mandatario de Salta se movilizó hacia el norte del territorio provincial. Ante el hallazgo de cinco nuevos casos de coronavirus en la zona, se entrevistó con las autoridades políticas y sanitarias. Sin embargo, su paso por el centro de salud de cabecera despertó polémica y rechazo entre el personal. De esta manera, los trabajadores del hospital de Orán repudiaron la visita del Gobernador Gustavo Sáenz.
El arribo de Sáenz a San Ramón de la Nueva Orán se produjo minutos de las 11. Desde ese lugar, la comitiva provincial se trasladó directamente hacia el Hospital San Vicente de Paul. En este orden, conversó con las autoridades del nosocomio, a fin de conocer cuál es el estado de salud de los infectados de COVID-19. Posteriormente, se interiorizó acerca de las necesidades que posee el sanitario, teniendo en cuenta el potencial agravamiento de la pandemia en el área.
Repudio
Sin embargo, mientras Sáenz caminaba por las instalaciones y dialogaba con los responsables del hospitales, buena parte del personal se manifestaba en contra de la administración provincial. En ese momento, indicaron que pretendían que el Gobernador o los funcionarios presentes atendieron las necesidades del lugar. Además, remarcaron que la seguridad de los dirigentes no permitía que muchos profesionales pudieran ejercer sus labores.
En declaraciones al portal de noticias Tu Voz Orán, una de las doctoras comentó que el hospital está «tapando agujeros» constantemente. Al respecto, aludió que no poseen suficientes respiradores para asistir a pacientes ante un eventual aumento exponencial de casos de coronavirus. A su vez, indicó que «con el personal pasa lo mismo». «Por eso queremos que el Gobernador nos escuche a nosotros, que le daremos otra realidad de lo que pasa en cada uno de los servicios», sostuvo.
En tanto, la médica mencionó que «los reclamos ya venían de antes». «La realidad que percibimos nosotros, los médicos que estamos en el campo de batalla, es otra», sentenció en relación a las versiones que difundieron los funcionarios salteños y los dirigentes del establecimiento. A su vez, expuso que «con el Gobernador nunca tuvimos ningún tipo de comunicación, siempre fue a través de nuestra gerencia». Por último, afirmó que «los reclamos son históricos de Orán: insumo, personal, infraestructura».