SALTA (Redacción) – En medio de la pandemia de coronavirus la Argentina, y la Provincia también, atraviesan una delicada crisis económica por la deuda en dólares contraída que no puede ser afrontada. Por su parte, Salta tiene emitida deuda en mercados internacionales en moneda extranjera mediante dos bonos. Uno de ellos al 2022 con garantía hidrocarburífera, cuyo pago fue cumplido con los respectivos intereses en junio de este año.
Sin embargo, el otro compromiso venció el 7 de julio pasado y no se pagó. Ahora, el Gobierno provincial tiene 30 días para reestructurar la deuda en dólares o entrar en default por primera vez. Ante este panorama, la administración de Sáenz buscará proponer una reestructuración de su deuda global, que incluye capital e intereses. Mientras tanto, la Nación ordena que todas las negociaciones las lidere el Ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán.
Nación comanda las negociaciones
El ministro Guzmán habría mantenido distintas conversaciones telefónicas con funcionarios de la provincia durante los últimos días, según indica FM Profesional. Además, describen que el economista fue contundente con una disposición: “Acá nadie saca los pies del plato y presionamos todos juntos”. Un caso es el de Río Negro que tampoco pagó un vencimiento de intereses por 11 millones de dólares, porque antes la gobernadora Arabela Carreras habló con el presidente Alberto Fernández. Allí ratificó esperar el acuerdo de Nación. “Tiene más capacidad de discusión y será beneficioso para los rionegrinos”, describió.
Cabe destacar que en caso de que Salta no abone su deuda, sería la primera vez que incumple un compromiso de pago de este tipo. Es decir, con bonos emitidos en dólares en el mercado internacional. Según recuerda el sitio Fm 88.9, el origen de este «bono 2024» por 300 millones de dólares a una tasa de 9,125% fue firmado por el anterior jefe de gabinete salteño, Carlos Parodi. El objetivo de este compromiso estaba destinado a la ejecución del «Plan Bicentenario». Además, según estaba previsto, el bono tenía una amortización de capital en los tres últimos años.
El dilema para Sáenz
Se debe señalar que el escenario no es el mejor para el gobernador Gustavo Sáenz. Porque es un compromiso de muy difícil cumplimiento en las condiciones actuales. Precisamente, tan grande sería el esfuerzo que para el periodo 2020/21 se necesitarían 16.600 millones de pesos. Y para el periodo 2022/2023 ese monto ascendería a 25.960 millones de pesos. Por tanto, la deuda debe ser refinanciada porque resulta imposible para la Provincia, pagar en los términos vigentes. Más considerando la crisis sanitaria por la pandemia.
Por tanto, el gobierno salteño acaba de solicitar un periodo de gracia de 30 días. Con el objetivo de presentar una propuesta de reestructuración de la deuda en dólares. Cabe aclarar que en este tiempo, puede renegociar los bonos y pagar como fue el caso de La Rioja. En el plano opuesto, podría entrar en default como hicieron Buenos Aires, Mendoza y Rio Negro. Los cuales siguen negociando con los tenedores de bonos con la conducción de Nación.
