SALTA (Redacción) – La falta de agua es una problemática que afecta a todo el territorio salteño y hasta el momento nadie pudo resolver. A pesar de los constantes reclamos y denuncias, las irregularidades en el servicio de Aguas del Norte siguen registrándose. Por este motivo, se presentaron varios proyectos con la finalidad de solucionar este problema. Héctor Chibán brindó detalles sobre los mismos y sostuvo que hay que resolver esto rápido, antes de que llegue la segunda ola.
En diálogo con Salta 4400, el diputado provincial sostuvo que ya hay proyectos presentados para extender la infraestructura de la red potable y solucionar la falta de agua. «Se viene prometiendo hace años y nunca se cumplieron. Y es por los superpoderes que tiene el gobernador, que baja el presupuesto de otros ministerios para mandarlo a gobernación», explicó, haciendo referencia a lo que ocurre con el Presupuesto 2021.
Según declaró, que este problema no se haya resuelto causa preocupación por la posibilidad de una segunda ola de contagios. «El gobierno nacional y el provincial han bajado la guardia. Me preocupa que no se insista a la población las precauciones que se deben tomar desde la parte sanitaria», aseveró. Además, sostuvo que cuando se trata de hacer un trabajo de concientización, lo hacen imponiendo el miedo y la culpabilización, lo cual evidentemente no funcionó.
Reclamos contra Aguas del Norte
Con respecto a esto, Héctor Chibán sostuvo que hay una falta de control por parte de la provincia y eso se notó en estas irregularidades. «Tenemos que soportar las contradicciones del director de Aguas del Norte que dice que trabajaba ad honorem, pero luego dijo que si cobraba sueldos», denunció. Además, se suma otro problema: no asumir la obligación constitucional de control.
«El poder legislativo no asume la obligación que impone la constitución de controlar a los funcionarios del estado. Esa es una vergüenza y por supuesto la historia definitivamente sumisa y controlada por el poder ejecutivo», sostuvo. Y agregó: «Si nosotros tuviésemos calidad institucional, y la legislatura asumiendo su rol de control, esta provincia sería otra cosa».