SALTA (Redacción) – Semanas atrás, Romina Arroyo presentó un proyecto que apunta a las mujeres víctimas de violencia de género. El proyecto busca entregarle kits de defensa personal, integrados por un gas pimienta y un instrumento como una pistola taser, para que estas mujeres puedan defenderse en caso de ser atacadas.
La idea de Romina Arroyo fue severamente criticada por los movimientos feministas que aseguraron que las mujeres no deben cumplir el rol de seguridad que debe brindar el Estado. “¿Qué le digo yo a esa mujer que tiene miedo de salir a la calle porque tiene miedo que la maten?”, expresó la concejala.
“¿Le digo que espere que el Estado y la Justicia le den una respuesta? A cientos de mujeres que tienen miedo de salir a la calle. Hay asociaciones feministas que dicen que el Estado y la Justicia tienen que dar respuestas, coincido”, afirmó Romina Arroyo que de todas maneras cuestionó la postura de los movimientos feministas que prefieren seguir confiando en el Estado.
La edil fue tajante al hablar sobre la situación de las víctimas de violencia de género. “Soy la creadora de la oficina de violencia de género en este concejo deliberante, la única fuera del Poder Judicial, vengo pidiendo consigna para el agresor, la unificación de denuncias, acompañé a un montón de víctimas, vengo pidiendo atención interdisciplinaria a las víctimas. La realidad de hoy es que hay cientos de mujeres con miedo que tienen derecho a protegerse”, manifestó.
“El gas pimienta no va a resolver la problemática, pero si le va permitir a una mujer tener cinco minutos para salvarse la vida y pedir auxilio. Puedo asegurar que muchas mujeres que murieron por violencia de género quizás se podían haber salvado con el gas pimienta”, concluyó Romina Arroyo.
