SALTA (Redacción) – Ayer, luego de una reunión con los jefes de bloques del concejo deliberante de Salta, donde la concejala Soledad Gramajo tuvo la oportunidad de defensa, se llegó a la conclusión que la conducta que es de público conocimiento, no ameritaba juicio político. De igual manera se supo que no todos los concejales, como Alberto Salim estuvieron de acuerdo con la decisión final.
El edil por la UCR, habló al respecto y dijo que no todos los concejales estuvieron de acuerdo con la decisión, pero que la normativa no acompaña este pedido. “Como Concejo no nos podemos apartar de lo que indica la normativa y si está mal habrá que hacer un planteo porque esto se suscitó ahora y no sabemos si hubo un caso anterior”, señaló.
La edila electa en las elecciones del 15 de agosto, realizó su descargo ante la Comisión, en la que pidió disculpas, primero ante sus pares y luego a los medios de comunicación. También reiteró que se actuó con malicia contra ella y que ya carga con una condena social. El pedido de juicio político había sido impulsado por el bloque de Juntos por el Cambio.
Presupuesto
En cuanto a las partidas que manejó el Concejo Deliberante anterior en el presupuesto, Alberto Salim sostuvo que hay información que se recibió ayer en reunión ampliada, donde se detalló que se había realizado una transferencia de partidas al Deliberativo Comunal porque no alcanzaba para pagar los sueldos.
“Hicieron una exposición de cómo se había ejecutado el presupuesto 2021, en donde nosotros cuestionamos la su ejecución en obras públicas”, comentó el concejal y aclaró en este punto que no se expuso sobre otras áreas. Mencionó que se indicó además que hay superávit, aunque todavía no se sabe cuánto. Esto se incorporaría al presupuesto del 2022.