SALTA (Redacción) – Tras dos años de clases virtuales, con pandemia de por medio y donde quedó a la vista los problemas estructurales de las instituciones educativas salteñas como también salarial, este miércoles 2 de marzo comenzó el ciclo lectivo nuevamente. Sin embargo, no todo es paz y tranquilidad ya que Ignacio Boasso, docente y sindicalista de La Caldera, anunció tambores de guerra para este año.
El docente arrancó siendo contundente en sus declaraciones: «El aumento es insuficiente. La docencia salteña hace cinco años que reclama una recomposición real del salario en contra de la inflación, esta paritaria propone una nueva caída del poder adquisitivo del salario docente, ya que ofrece un 45 cuando en un año que se prevé un 60 por ciento de inflación, y es el sexto año de caída adquisitiva», planteó Ignacio Boasso.
Siguió reclamando al gobernador Sáenz y al Ministerio de Educación: «Entonces es acuciante, no podemos esperar más, debemos exigir al gobierno que recomponga el salario hasta que ningún docente quede debajo de la línea de la pobreza, trayendo todos los porcentajes ahora y poniendo una cláusula indexatoria, esa sería una solución salomónica», recriminó Ignacio Boasso.
Si bien, no quiso hablar de cifras cuando se le consultó cuánto gana un docente, si aclaró «es que depende, este año hicieron una paritaria con un porcentaje nominal muy parecido al porcentaje de bolsillo, pero si ve el escalonamiento del aumento va a descubrir que se retrasa con la inflación en dos etapas, y en setiembre queda clavado en 45%, y hasta febrero del año que viene, nos vemos…», explicó.
De esta manera, aseguró que la lucha va a continuar según «lo determine la asamblea«. Si aseguró que «va a ser un nuevo año conflictivo porque así lo propone el gobierno, no los docente». Concluyó poniendo en jaque el discurso del superávit del Gobierno: «¡Cómo no van a tener superávit si no han dejado de contraer la economía, no invierten en salud, en educación y con paritarias a la baja, cada año pueden declarar superávit fiscal!».
