SALTA (Redacción) – El presidente del Partido Felicidad de Salta participó de un programa televisivo. Allí Mauro Sabbadini planteó que como espacio político siguen formando parte del Frente de Todos pero que esperan que el mismo se amplíe, además expresó su preocupación por los armados electorales en Salta. En el mismo sentido, advirtió que la dirigencia política se está alejando de los problemas reales de la gente.
En primer lugar, aclaró que «los partidos políticos deben tener una relación con la sociedad más transparente». Al respecto, el Estado deberá tener «una relación más tutelar» sobre los aparatos partidarios. Sabbadini detalló que «el Estado nacional distribuye 330 millones de pesos para todos los partidos de la Argentina» y para los 30 partidos que existen en Salta se distribuye aproximadamente 9 millones. «Cada uno recibe para su funcionamiento 300 mil pesos por año, 25 mil por mes. Hay un componente fijo y otro variable».
Al respecto, resaltó que «los partidos deben recurrir a otros mecanismos de financiamiento y eso no es recomendable”. No todas las fuerzas políticas tienen la misma financiación ni recaudación y por eso Sabbadini planteó que cuando todo se calme «tenemos que discutir esto porque el rol de los partidos es central para la democracia». En especial para evitar el salto de un partido político a otro, explicó el dirigente de Felicidad.
En este sentido, usó el ejemplo de Gustavo Sáenz. La estrategia que utilizó después de finalizar su gestión como intendente pegó el salto siendo el candidato a vicepresidente de Sergio Massa. Pero luego se hizo cargo de la gobernación del Gobierno de la Provincia de Salta acompañado por Juntos por el Cambio. Finalmente, «ahora se recuesta sobre el Frente de Todos», enfatizó Sabbadini.
El Partido Felicidad y las próximas elecciones provinciales
En referencia a la situación del Partido Felicidad aclaró que el año que viene definirán las estrategias cuando hagan la asamblea correspondiente. Sin embargo, aclaró que «poder acompañar o protagonizar un espacio político con una propuesta clara para toda la provincia”. Aunque también se plantea la posibilidad de avanzar hacia «un lugar sin demasiadas alianzas», pero Sabbadini reconoció´que esto último podría restarles votos.
Más allá de todo esto, dejó bien en claro que «antes que el eventual resultadismo están nuestros principios. Eso es anterior a cualquier acuerdo que podamos llegar a hacer», afirmó Sabbadini. «Nos sentimos parte de un sector del Frente de Todos a nivel nacional. Seguimos acompañando al presidente Alberto Fernández y a la vicepresidenta Cristina Fernández manteniendo nuestras críticas en estado público, pero no significa que este Frente de Todos exista para competir en el año 2023”.
Por último, en lo que respecta específicamente al armado provincial reveló que el diálogo con las demás patas del Frente de Todos sigue de pie. Salta para Todos, el Frente de Todos y el Frente Grande eran las patas del armado electoral que se terminó fracturando, a esto se suma el Partido Igualar del exdiputado Santiago Godoy. «No significa que terminemos confluyendo en un mismo frente, pero al sentirnos parte del campo nacional y popular el diálogo es permanente», concluyó Sabbadini.