SALTA (Redacción) – La situación social y económica cada vez es más grave y crítica en todo el país. Los sectores populares y los de menores recursos tienen que recurrir a los comedores comunitarios o merenderos para garantizarse un plato de comida. Cristina Foffani estuvo reclamando en la Plaza 9 de Julio junto a los militantes de la Unidad Piquetera para recibir mayor asistencia económica.
Toda la jornada de ayer se llevó a cabo diferentes acampes en todo el país. En Salta participaron aproximadamente 4.000 personas de 11 movimientos sociales diferentes. Las mayores críticas fueron hacia el Gobierno nacional y también al de la Provincia. Piden mayores asistencia para los comedores y merenderos donde alimentan a familias de bajos recursos. Foffani explicó cómo se maneja la situación en el territorio provincial.
«La provincia tiene solo una política de transferir los bolsones que llegan de Nación y nada más. No habilita ningún presupuesto ni porcentaje del presupuesto provincial para el sostenimiento y la asistencia de los merenderos y comedores que son reclamados y solicitados en todos los puntos de la provincia ante el crecimiento del hambre”, criticó Foffani ante la crítica situación social que se vive en el país.
«Aquel que no llega organizado y plantea una demanda contundente a través de movilizaciones no consigue que se le garantice la asistencia. Son unas 30 o 40 familias por merendero, en el interior tienen hasta 10 hijos cada familia. Hoy estamos sosteniendo entre 90 y 120 chicos en cada merendero. Si no fuera por las organizaciones o algunos trabajadores hoy habría una enorme cantidad de chicos sin poder tomar leche y eso es terrible», advirtió Foffani al respecto.
El presupuesto otorgado a los merenderos en Salta
En este sentido, la dirigente de la izquierda salteña aclaró que la provincia definió que cada municipio tenga un monto determinado de dinero para cubrir estas necesidades. Tan así que las localidades más pequeñas reciben $330.000 y un millón las que son más grandes. Foffani, a su vez, resaltó que desde Desarrollo Social solo reconocieron la ayuda a 2 o 3 merenderos cada una de las organizaciones a cargo. Sin embargo, esto no sirve porque «cada una tiene decenas de merenderos a cargo».
Por su parte, lo que respecta a la situación de los comedores puntualmente es mucho más complicada ya que juntan plata los propios organizadores. Con la misma terminan comprando carne y verdura debido a que el Gobierno nacional no asiste con frescos, denunció Foffani. Además, desde la gestión de Gustavo Sáenz confirman que ellos no se hacen cargo de los merenderos ni de comedores.
«El diálogo con Silvina Vargas es muy amable, nos recibe, pero dice que no hay plata y que tenemos que esperar al año que viene porque ya se ejecutó el presupuesto de este año. Les planteamos que ellos tienen como cierre del 2021 un superávit de 12 mil millones de pesos y nos dijo que lo discutamos con Dib Ashur, lo cual es ridículo. Acá el que dirige la lapicera es Sáenz y la plata la dispone para otras cosas«, criticó Foffani.
