SALTA (Redacción) – El diputado nacional Carlos Zapata suele tener un discurso muy crítico hacia lo que la gestión del Frente de Todos. También toma distancia constantemente del gobernador Gustavo Sáenz. De acuerdo al legislador ambos líderes políticos no respetan a la institucionalidad y sobrepasan los límites establecidos por la división de poder en un sistema republicano.
De acuerdo a su postura y mirada, el legislador aseguró que el kirchnerismo busca siempre atajos para evadir la institucionalidad política. Sin nombrarlo pero teniendo en cuenta el contexto, hay dos hechos que sirven como muestra de este planteo de Zapata: la suspensión de las PASO en Salta y la imposición en la agenda pública de una reforma constitucional nacional para eliminar las elecciones intermedias.
«Normalmente cuando están en el poder, si es kirchnerista, busca tener atajos para cumplir con sus objetivos«, aseguró Zapata. «Ponen en duda o tienen leyes que pasan por sobre la institucionalidad o quieran llevarse puesta la división de poderes. O tener un avance y condicionar a la Justicia», describió el diputado nacional sobre la pelea de la política con el sistema judicial argentino.
«La Justicia se ha transformado en una obsesión«, aclaró Zapata, replicando una frase que dijo previamente Miguel Nanni, con quien compartió una cena. En este sentido recordó que el sistema judicial no sólo resuelve los litigios entre particulares sino que es el «último reducto donde se puede recurrir como ciudadanos» para defender nuestros derechos y garantías ante el poder del propio Estado.
El diputado expresó su preocupación por el comportamiento de ciertos jueces
El diputado nacional también se refirió sobre el rol que juegan los magistrados y la posición que deben tomar. «Cuando un juez se viste de imparcial ya está dando un mensaje claro de que hay un delito en flagrancia», aclaró. A esto se suman luego los juegos desestabilizadores, la demonización de la justicia y «esto es un grave atentado al orden democrático», reflexionó Zapata al respecto.
También planteó que hay gobernadores más pobres en sus desempeños y respetos a la institución. Ahí fue cuando entró con las críticas a la gestión de Gustavo Sáenz. Recordó el aumento del número de miembros en la Corte Suprema de Justicia de Salta, la reforma de la Constitución, la emergencia sociosanitaria, la vacunación, etc. «El presidente y el gobernador pasan por encima de la institucionalidad» remarcó en en este aspecto.