SALTA (Redacción) – Las tarias de los servicios estuvieron congeladas durante dos años. Para intentar tener un impacto menor en los estratos más bajos, el Gobierno Nacional segmentó las tarifas. Sin embargo, para la clase media y alta los incrementos alcanzaron hasta el 128%. Esto provocó la molestia de los vecinos del norte que protestaron ante EDESA. Por este motivo, Ricardo Villada defendió la postura del Gobierno Provincial.
El ministro de Gobierno aseguró que este incremento sumado a las fallas del servicio se da como consecuencia de gestiones anteriores. «Lo que está pasando es el arrastre de una situación histórica que hace crisis en momentos en donde las temperaturas aumentan mucho y como consecuencia, el consumo de energía», manifestó Ricardo Villada.
El funcionario del Gobierno Provincial reconoció que las facturas se tornaron «casi imposibles» de pagar y explicó las medidas implementadas con esta situación. «El 11 de enero, a través del Ente Regulador de Servicios Públicos, con la suspensión del cobro del periodo de diciembre de 2022. A partir de ello se disparó un proceso de auditoría o de investigación para poder determinar cómo han sido los incrementos de consumo y qué consecuencias han tenido sobre la tarifa», señaló.
«Paralelamente y a los fines de dar certeza, que se puede prolongar hasta febrero, por lo que el Gobernador con un decreto estableció un tope en la facturación con referencia de noviembre de 2022. Aquellas personas que viven esos departamentos y han tenido un incremento superior al 30% y que pertenecen al segmento N2 y N3 -no son de altos ingresos- tienen que pagar únicamente el valor de referencia», explicó Ricardo Villada.
La extensión de las medidas
Por último, el ministro de Gobierno explicó la duración de estas medidas que culminarán meses después de las elecciones provinciales. «Se estableció una campana durante estos 180 días. En los que junto al Gobierno nacional vamos a tomar medidas para paliar la situación en el mediano plazo», sentenció Ricardo Villada.
