SALTA (Redacción) – La Municipalidad de Salta comenzó el año aplicando un fuerte impuestazo sobre los vecinos. Esto abrió una nueva discusión entre el Concejo y el Ejecutivo, pero nada de esto podría haber ocurrido si los concejales no daban el visto bueno a fin de año a este ajuste. Agustina Álvarez fue de las pocas ediles que votó en contra en su momento y aseguró que todo esto «es una demencia».
En este sentido, la concejala del PRO cuestionó a los ediles que habían votado a favor y ahora pretenden retroceder con esta medida. «Era una locura votar un aumento del 77% y una actualización con un tope del 30%», expresó Álvarez. A su vez, aclaró que todo esto se daba «con aumento también de las unidades tributarias y la famosa recategorización en facultad del Ejecutivo Municipal»,
Por lo tanto, explicó que si antes algunos vecinos pagaban $1.000 o $1.500 ahora tendrían que pagar entre 8.000 y 10.000. Ante este panorama, la concejala advirtió que «es una demencia en la situación económica en la que nos encontramos y con la cantidad de obras que faltan». Al mismo tiempo, Álvarez volvió a criticar porque «se gasta mucho dinero en publicidad y propaganda».
La concejala analizó la gestión de la intendenta Romero
Lógicamente que para la concejala salteña opositora al Gobierno municipal no podía faltar la crítica hacia la intendenta de Salta. «La gestión de la intendenta Bettina Romero no escucha la demanda de los ciudadanos y no se generan políticas públicas que logren puestos de trabajo”, enfatizó Álvarez. Volvió a hacer hincapié en las publicidades y el marketing municipal pidiendo que se elimine el presupuesto destinado a eso.
Por último, volvió a reprochar la función de los concejales porque las ordenanzas recaudatorias avanzan mucho más rápido que aquellas que podrían mejorar las condiciones de vida de los vecinos. «Hay que rever las decisiones políticas de manera general«, advirtió Agustina Álvarez sobre las decisiones que se toman en el ámbito legislativo.
