SALTA (Redacción) – Este domingo Argentina puede vivir un momento histórico y bisagra en su vida democrática. La llegada a la Casa Rosada de Javier Milei es una de las posibilidades de este domingo. Walter Wayar advirtió y recordó que son diferentes factores del poder económico y político quienes lo dejaron crecer. En un programa televisivo analizó sobre todo esto.
Sin embargo, antes de entrar de fondo al análisis y mirada sobre la figura libertaria remarcó que la clase dirigencial actual también es responsable. Hay una «falencia dirigencial en el país que hace difícil la gobernabilidad«, cuestionó Wayar. Pero, a todo esto, se suma también la «influencia e inducción de un poder de comunicación importante», criticó.
«Hubo una época donde los medios de comunicación centrales, los del obelisco, empezaron a hablar de que se tenían que ir los políticos mayores de 45 años, que era la era de los de 40», recordó a su vez. «No todos porque nunca hay que generalizar, pero muchos de ellos que llegaron a cargos, lo único que les interesaba era ser una generación exitosa, y el éxito para ellos era tener plata», expresó Wayar.
«Hoy de nuevo están con que se tienen que ir todos, tiene que venir lo nuevo y te presentan como lo nuevo a alguien que tiene nada hecho por sí», reflexionó. Sin embargo, «siempre ha sido empleado de los poderes económicos. Si te dice malas palabras es gracioso y simpático, inteligente y revolucionario y transgresor. Si yo diría las cosas que él dice, sería un negro patotero e ignorante peronista», aclaró Wayar.
Una referencia a los libertarios
Finalmente, concluyó refiriéndose a las posturas de Javier Milei y su espacio político. «Dicen que van a pisotear la Constitución, que van a sacar la educación gratuita, la salud gratuita, que no pueden por Constitución, pero te van a decir los votos me legitiman. Te dicen voy a poner el ejército en la calle si se sublevan y después van a decir me votaron«, explicó Wayar. A modo de cierre, reflexionó diciendo que «una mente que no está del todo sana, es muy difícil luego que la racionalidad te ponga límites y eso puede ser muy peligroso», finalizó.