SALTA (Redacción) – La durísima derrota de Sergio Massa deja mucho por discutir al interior del campo popular. Días después comienzan a aparecer las primeras acusaciones y cruces de dedos. Mauro Sabbadini, presidente del Partido Felicidad, contó que muchos de sus afiliados decidieron jugar con el candidato libertario y no con el del oficialismo.
En este sentido, Sabbadini contó que los días posteriores a las elecciones generales hubo un fuerte debate interno. Desafortunadamente el 15% de Felicidad no estaban dispuestos en seguir apoyando a Sergio Massa en el ballotage y prefirieron acompañar al libertario. Por ejemplo, en el bunker libertario de Salta estuvo presente Jimena Loayza, quien fue candidata a vicegobernadora en las elecciones provinciales.
También confesó que los días posteriores al resultado de las elecciones generales se presentaron renuncias que no fueron aceptadas. Todo esto generó un gran descontento para Sabbadini. De todos modos, reconoció que lo que está pasando en la Argentina tiene que ver también con discusiones de orden ético. Hay una situación de hartazgo que tiene que ver con lo ético y con el fracaso de nuestro gobierno, esa es la realidad», cuestionó.
Los trapitos al sol
Al mismo tiempo, Sabbadini reconoce que gran parte del enojo interno en Felicidad se debe a que «hubo un engaño de un gobierno que se decía peronista, que empobreció a la Argentina, que siguió robando y que Sergio Massa no era un representante válido para ellos”. Con todo esto, acompañar a Unión por la Patria se convirtió en algo muy complejo internamente.
A confesión de parte relevo de pruebas: hay dos responsables de haber travestizado el espacio. «el campo nacional y popular hizo un acuerdo con Alfredo Olmedo para la elección provincial. Entonces que Jimena, Pedro o Juan se abracen con un amigo o una amiga y estén festejando el triunfo del mentiroso de Javier Milei es un dato menor. Estrada y Leavy fueron los corruptores morales al menos de nuestro espacio«, recriminó Sabbadini.