SALTA (Redacción) – No cabe duda que el nuevo ciclo político iniciado el pasado 10 de diciembre ha puesto a cada uno en el lugar que más cómodo lo deja. Si bien nadie dudaría de las perspicacias de Carlos Zapata y de su acérrimo antikirchnerismo, la jugada de Ahora Patria con Javier Milei le viene como anillo al dedo y se acomodó mejor que nunca.
En lo que es el actual debate en la Cámara de Diputados por el Proyecto de Ley Ómnibus se muestra a flor de piel los intereses corporativos de los legisladores. Carlos Zapata está haciendo lobby a favor de la tabacalera Sarandí para que siga sin pagar impuestos. Fue el periodista Carlos Pagni quien publicó una extensa columna de opinión y reveló pormenores del Congreso.
El prestigioso comunicador da a conocer el accionar de diferentes legisladores y entre ellos mencionó a Zapata. «La ocurrencia de enviar al Congreso un mamotreto de 664 artículos en los que se amenaza con remover prebendas o derechos a infinidad de sectores, ha dado lugar a innumerables negociaciones paralelas», comienza el informe de Pagni.
«Una que amenaza con convertirse en un escándalo es la que se desarrolla alrededor del impuesto a los cigarrillos. Ese gravamen ha enfrentado a las grandes multinacionales, como Phillip Morris o British American Tobacco, con Tabacalera Sarandí, del empresario local Pablo Otero. Sarandí, afirman en el mercado, habría recurrido para esa disputa a grandes celebridades del submundo: desde Antonio Stiuso a Adrián Kochen», detalla Pagni.
El rol de Zapata para defender la tabacalera salteña
Con la meta de poder sostener el status quo de la tabacalera Sarandí es que un grupo de diputados pidió que se dé de baja un artículo de la ley. Infinitas veces ya hemos comunicado en este medio que dicha compañía «evita pagar el impuesto a los cigarrillos escudándose en una medida cautelar». Zapata y otros legisladores argumentan «que termine de decidir la Justicia, para eso hay un proceso».
En un fragmento final el periodista Pagni termina su columna revelando que diputados están detrás de este juego. «Las multinacionales identifican a tres de ellos detrás de esa gestión: Diego Santilli, quien anteayer se mantuvo callado durante toda la reunión con el equipo económico, salvo cuando apareció el tema tabacalero; el candidato de Macri a presidir la Cámara, Cristian Ritondo, a quien sus viejos amigos de Mataderos comenzaron a llamar, con todo cariño, “Pucho”; y el kirchnerista salteño Carlos Zapata. Habladurías que podrían confirmarse por algunos movimientos registrados la semana pasada en el plenario de comisiones».
