SALTA (Redacción) – No cabe duda que el disruptivo gobierno de Javier Milei genera fuertes discusiones en el ámbito familiar. Así como habrá un paro general este miércoles 24 en contra del presidente, también se realizará un cacerolazo a su favor. El «antiparo», tal cual lo llamaron, está organizado por el representante de la Agrupación de Pymes, Emprendedores y Productores, Rodolfo Llanos.
Fue justamente el empresario quien explicó el objetivo de esta actividad. «Lo que hace la CGT es para defender la cuota sindical y la plata para las obras sociales, cosa que no beneficia a ninguno de los argentinos. Entonces como nosotros estamos a favor y en defensa del trabajo argentino, convocamos a un cacerolazo el 24 a la 13 para que los dirigentes de la CGT entren en razones, que escuchen al pueblo argentino«, argumentó Llanos en contra del paro.
«Nosotros no llamamos a una concentración, no llamamos a que la gente se junte en un lugar, simplemente llamamos a que se pongan la camiseta de la Selección«, aclaró. Al mismo tiempo, aseguró que «nosotros no queremos hacer nada que contribuya a un enfrentamiento entre argentinos». El empresario PyME admitió que «lo que estamos haciendo con esta manifestación es decirle a los dirigentes de la CGT que tenemos que sacar el país entre todos y no por intereses sectoriales caprichosos«.
El empresario defendió la reforma laboral
Una buena razón para repudiar el paro de la CGT y otros sindicatos es porque defienden la reforma laboral impulsada por el gobierno. Según Llanos, las modalidades de contratación y el modelo iniciado en el 2001 han fracasado. Por eso sostiene que es necesario defender los cambios en el marco legislativo laboral. Asegura que es beneficiosa para los trabajadores y para las PyMES.
La reforma propone que los trabajadores estén 8 meses de prueba, lo cual supuestamente permitirá aliviar la registración. «Durante ese tramo de ocho meses cambia radicalmente los beneficios que recibe el trabajador», justificó. A modo de cierre, planteó que tal vez sea prematura la convocatoria de la central obrera.
«La CGT tendría que haberlo hecho en marzo después de que se iniciaron las ordinarias, que presentaron sus proyectos de ley y que presentaron sus posturas antagónicas a lo que se reforma. Tomar un tiempo de implementación para ver cuáles son las consecuencias, porque ahora mire lo que va a pasar. Supongamos que a mí nadie me acompaña y suena una sola cacerola en la Argentina. Listo, un tipo convocó, no le dieron bolilla y eso es lo normal y lo que puede ocurrir. Ahora, ¿cómo queda la CGT si son miles de argentinos que participan del cacerolazo? Queda totalmente ninguneada y demostrado que no tiene fuerza. Entonces, para mí es un error estratégico esto que hicieron», se preguntó el representante de la PyMES.