SALTA (Redacción) – La relación entre los gobernadores y el presidente Javier Milei prácticamente se ha roto. O al menos, eso es lo que parece observarse en las diferentes opiniones públicas de los principales actores de la política. Pablo Outes había votado en general el Proyecto de Ley Ómnibus y luego terminó rechazando el articulado en sus puntos particulares.
Después de las acusaciones de traición del presidente a los gobernadores, el legislador que responde al riñon de Sáenz también salió al cruce. «Tratar de ladrones y traidores a los gobernadores no es bueno. No hay ningún acuerdo sellado ni firmado. Lo dijo Sáenz, yo resguardo a mi provincia. Vamos a seguir en la mesa de diálogo de Argentina porque el país lo necesita», expresó Outes.
También recordó que es cierto que se habían comprometido votar a favor en el proyecto general, pero con disidencias en artículos particulares. «Habíamos anunciado que no queríamos que se privaticen empresas estratégicas como YPF y Ferrocarriles. Otras 37 empresas estábamos de acuerdo. La inexperiencia de Milei en diálogo político es llamativa», argumentó Outes.
Además, responsabilizó al presidente por la falta de llevar a cabo su gestión y su trato con los demás actores de la política. «Están banalizando la política de una manera terrible. Los gobernadores necesitan recuperar el porcentaje que perdieron con el impuesto a las ganancias. No creo que eso sea seguir con los curros. No nos alcanza el dinero», señaló Outes.
Preocupación por el transporte público
Por último, también expresó su preocupación por la quita de subsidios al transporte público. «Veo altamente riesgoso lo que hizo con la quita de subsidio al transporte. La gente está soportando al 90% del ajuste. La presión de Caputo hacia los gobernadores con no enviar las partidas no automáticas ya es una realidad», señaló a modo de cierre Outes.