SALTA (Redacción) – El derecho a la vivienda y alquilar se ha vuelto una verdadera odisea en los últimos tiempos. Junto al tipo de cambio que fue a la baja en estos últimos días, posibilitó que el mercado inmobiliario tenga algunos movimientos. Desde la Federación Inmobiliaria de la República Argentina (FIRA), su director Juan Martín Biella compartió detalles del sector.
Después de varios meses, finalmente la divisa norteamericana terminó estando por debajo de los $1.000 y el contacto con Liqui (CCL) quedó en $1.021. Con respecto al mes de enero, se trata de dos mermas muy importantes y Biella detalló que eso dio lugar a un movimiento del mercado inmobiliario.
«Es como que en un momento dado, la gente se quiso sacarse el dólar y volver a los ladrillos. Es algo positivo», destacó el agente inmobiliario. «Creo que ahora se va a reactivar el mercado porque no veo que haya una falta de dólares. Están aumentando los alquileres, veo que los propietarios están empezando a ser un poco más razonables. Es positivo a menos que haya un caos político en el medio«, enfatizó Biella.
Derogación de la Ley de Alquileres
Una de las primeras medidas que tomó el presidente Javier Milei al asumir fue derogar la Ley de Alquileres. Eso dio lugar a que se reactiven la compra-venta con operaciones que van desde los 20.000 a 500.000 dólares. «Realmente, aumentó la venta. El libre pacto entre partes ha hecho que la gente nuevamente entienda o piense que comprar e invertir en la propiedad es tener una jubilación segura, así que se está moviendo mucho», explicó.
«El tema de alquileres también, hay bastante más ofertas y la gente tiene oportunidad de elegir, los precios están un poco altos todavía. Un 20% de las operaciones se está haciendo en dólares y el 80% se está haciendo en pesos. La actualización es trimestral o cuatrimestralmente y los contratos tipos son cada dos años», detalló Biella.
Sin embargo, el principal problema para los inquilinos es la alta inflación que tiene la economía del país. Todo esto abre el escenario de que muchos inquilinos no puedan afrontar el pago ni el cumplimiento de los contratos. «Lo que es más complicado, es que sigue habiendo problemas de pagos con los comerciantes, ya hay un 5%, o un poco más ahora, de locales vacíos. No hay renovación, o sea, quiere decir la actividad económica está un poquito caída, no hay plata en el bolsillo de la gente. Sin embargo, nuestro mensaje siempre es cuiden el inquilino, porque inquilinos que cuiden la propiedad y que tengan capacidad de pago en los próximos 60, 90 días, no van a abundar», concluyó Biella.