SALTA (Redacción) – Esta mañana se vivieron momentos de tensión en la puerta de la sede de la Asociación Docente Provincial (ADP), debido a que las nuevas autoridades del sindicato le negaron el ingreso a la extitular de la entidad, Patricia Argañaraz. Al finalizar la reunión que se improvisó en la puerta del edificio, la dirigente calificó como “patoteros” a los miembros de la cúpula del sindicato.
Cuando llegó al lugar, Argañaraz aludió que pretendía ingresar a la sede para desempeñar su cargo de Secretaria General, debido a que recientemente el Ministerio de Trabajo de la Nación decidió no convalidar las resoluciones que se emitieron semanas atrás en la asamblea de la ADP, entre las que se hallaba la destitución de la docente. “Después de haber examinado la documentación durante casi más de dos semanas, se determinó que la asamblea quedó anulada porque estuvo absolutamente viciada”, aludió.
“Yo soy la Secretaria General”, exclamó el dirigente, quien además aseguró que, en estas condiciones, la asamblea “no está representado a los docentes”. Asimismo, denunció que la cúpula del gremio “quiere hacer notificaciones y recusaciones”, pero advirtió que “no hay vuelta atrás del fallo a nivel nacional”.
“Esto es delito, no dejarme entrar a mi lugar de trabajo”, aseveró Argañaraz, quien principalmente cargó contra la abogada de la Comisión Directiva, Liliana Hermosilla: “Ella en todo momento incitó a la violencia. Después de todas las mentiras que desparramó por todos los medios, habló patoterismo, de que esta guerra va a ser a morir. Eso no lo puede decir una abogada que representa a los docentes. La repudiamos por todas estas manifestaciones, pero tampoco puede seguir representando a los afiliados”.
En tanto, la docente afirmó que esta negativa no afectará su decisión de concurrir a “todos los días” a la sede de la ADP hasta que le permitan ingresar y, en consecuencia, recuperar su puesto. “La Justicia tiene que resolver este tema”, reclamó el ex mandataria del gremio, quien confesó que había previsto que esta situación podía llegar a ocurrir.
Consultada acerca del certificado médico que tuvo un papel importante en el proceso de destitución, Argañaraz refirió que esa información ya pasó “por todos los medios de comunicación”. “Un ACV no es lo mismo que un accidente isquémico. Yo sufrí una parálisis de la mitad de mi cuerpo, que sucedió por esta situación crítica”, expuso.
Consultada por la manera en la continuará su reclamo, la dirigente aseguró que seguirá “haciendo las denuncias” correspondientes para que finalmente se pueda normalizar su situación. En tanto, repudió que la cúpula del gremio siga “sin acatar” la disposición del ministerio nacional. “Estaban atrincherados en una ADP vallada. Nunca antes existió esto, es sorprendente. Yo no puedo cambiar la Comisión Directiva, pero sí puedo tener mi equipo de trabajo”, concluyó.
