SALTA (Redacción) – El titular de SAETA, Claudio Mohr, informó que desde la empresa se dispuso la semana pasada “acompañar a los jubilados y pensionados en el cobro” en plena cuarentena. Aunque remarcó: “Visto lo que ha ocurrido el viernes, y viendo que había un cronograma, se ha acordado desde el Comité de Emergencias que nosotros hiciéramos lo mismo, que lleváramos jubilados teniendo en cuenta la terminación de los documentos”.
Así, explicó que la frecuencia entre unidades es de 30 minutos, y funcionan en los horarios de 5.30 a 9.30 y de 11 a 16, acompañando el cronograma de pago de ANSES y de los bancos, que habilita mañana a los jubilados que tengan terminación de DNI 6 y 7. Igualmente, destacó en FM 88.1: “El viernes acompañamos la medida, pero no tuvimos un crecimiento demasiado importante en el transporte en términos de jubilados porque eran los únicos autorizados a viajar”. En tal sentido, precisó que se pasó de tener un promedio de seis pasajeros por unidad por día a tener nueve, poco más del 35%.
Recordó también que quienes cobraban el bono de 10 mil pesos y la Asignación Universal por Hijo no estaban autorizados a utilizar el transporte público. “Los jubilados entienden que puede viajar la franja que está habilitada por día de pago, pero no lo están haciendo en masa”, insistió. Además, ante los reclamos de algunos usuarios explicó: “Pudiera pasar que algún jubilado que no tiene la terminación que corresponde al pago de hoy, a la franja, no esté siendo levantado”.
Transporte gratuito
Asimismo, respecto a versiones que señalan que algunas tarjetas de jubilados fueron suspendidas al inicio de la cuarentena, afirmó: “Hemos tenido todo el sistema funcionando hasta que se determinó la cuarentena. En ese momento, el Comité Operativo de Emergencias determinó, por orden del Gobernador, que el transporte quedaba exclusivamente para personas de seguridad y salud, y suspendimos el servicio para el resto de las personas”.
Resaltó también que “la decisión fue que el transporte era gratuito”, por lo que se decidió apagar todas las máquinas tanto de recarga como el sistema de cobro en los colectivos. “La única forma de subir los primeros días era personal de seguridad uniformado y en el caso de la gente de salud con un certificado emitido por los nosocomios o un recibo de sueldo o una credencial. Algunos pícaros comenzaron a falsificar certificados así que migramos a un sistema de tarjetas nominadas, que emitimos trece mil en los últimos diez días.