SALTA (Redacción) – Juan Pastore, dueño de confiterías y locales gastronómicos de Salta en diálogo exclusivo con Salta4400 sobre el contexto generado por el coronavirus, planteó que llevan 45 días sin trabajar, sumado a 5 o 6 días previos que ya el 50% de los locales habían cerrado. Con eso “prácticamente estaríamos llegando a los 2 meses”, dijo y consideró que “es terrible, tengo colegas que ya están cerrando locales, nosotros estamos viendo qué hacer pero estamos con mucho temor”.
En ese sentido usó una metáfora para describir la situación, “no vemos una luz a mediano plazo de nada, la estamos pasando muy mal. No llegamos a cubrir nuestra responsabilidades, porque no tenemos ingreso de dinero”. Y en ese punto refirió contra el Gobierno, “no tenemos las ayudas que anunciaron con bombos y platillos, no fueron efectivas para nada porque vas a los bancos y todavía no hay resultado de nada, ni préstamos de nada”, cuestionó.
De la misma manera, Pastore advirtió que “los impuestos siguen llegando tanto municipales como nacionales”. Por lo que ironizó, “parecería que no saben bien lo que está pasando, que no saben que sin una fuerza productiva de la parte del sector gastronómico, hablando en general, esto no funciona. Es el único ingreso que tener dinero el Estado, parece que no lo tienen claro. Si esto se cae, va a ser terrible, esa es mi apreciación”.
Costos básicos
En cuanto a los alquileres, remarcó que algunos pudieron hacer acuerdos con los propietarios, pero aclaró que ellos también viven de esto y se ven perjudicados. Con el tema de los sueldos es la misma historia, “nosotros tenemos que ir y pagar, no tenemos muchas opciones”, aseguró. A lo que agregó que “hacemos un esfuerzo, lamentablemente se está sacando por ahí de algunos ahorros que podríamos haber llegado a tener en su momento, pero ya se acabó, no sabemos cómo va a continuar esto”, se lamentó.
Ante la consulta por la vuelta al ruedo, entendió que va a depender de la cantidad de casos que haya en la Provincia. Y pensando de esa forma, planteó que se blinde y se cierren las fronteras para que se sigan sumando. “No creo bajo ningún punto de vista que esto tenga una solución inmediata si los bancos no empiezan a ser un poco más flexible con el sector, el Gobierno también”, concluyó.
