SALTA (Redacción) – Miles de familias continúan afrontando los perjuicios que se desataron a partir de la crisis en Salta. En ese sentido, existe cada vez más preocupación acerca del funcionamiento de diversos espacios emblemáticos de la capital. Por este motivo, advirtieron que más de 4 mil personas dependen de los ingresos del Mercado San Miguel. Al respecto, el presidente de la Fundación que administra el organismo, José Muratore, afirmó que los trabajadores «la han estado pasando mal durante 60 días».
En diálogo exclusivo con SALTA4400, Muratore remarcó que los horarios del mercado están «volviendo a la normalidad». Además, agregó: «Hemos sido los primeros en Salta en hacer la cuarentena«. Ante ello, destacó el «sacrifico y acompañamiento» que demostraron los puesteros del predio. A partir de hoy, el establecimiento comenzará a operar franjas horarias. Según expuso, por la mañana estará abierto de 8 a 14. En tanto, aludió que a la tarde funcionará entre las 17 y las 20.
Asimismo, el administrador del Mercado San Miguel admitió que la afluencia a la tarde durante las últimas semanas estuvo «medio floja». Por su parte, recordó que los puesteros no debieron abonar «piso» durante las jornadas en las que no hubo atención al público. Igualmente, apuntó que existen «gastos fijos», aunque valoró que «la gente está colaborando con eso». «Esto lo sacamos entre todos. No hay nada individual acá, tiene que ser todo grupal», exclamó.
Crisis en el Mercado San Miguel
Consultado por los rubros del mercado que más sufren esta crisis, Muratore indicó que son los locales de venta de indumentaria. Al mismo tiempo, confesó que «lo único que falta por habilitar es el sector de la comida». «Estamos trabajando en un protocolo para presentarle a la Municipalidad y al Gobernador para que puedan abrir. Está pensado para que cada local habilite dos o tres mesas, con la división de plásticos o de policarbonato», describió.
Finalmente, el titular de la Fundación indicó que el predio posee 480 puestos. «En el rubro gastronomía son 7, 9 familias por puesto. En cada puesto tenés 6, 7 familias. La gente del mercado por lo general es de familia numerosa», ilustró. Finalmente, Muratore enfatizó que el objetivo de esta reactivación es que «todos volvamos a empezar de apoco, recuperando el tiempo y el trabajo perdido». «Eso ha sido lo que más sufrimiento le ha dado a la gente», concluyó.