SALTA (Redacción) – En línea con lo que venía sucediendo respecto a la sobrefacturación por parte de Edesa, el Dr. Carlos Saravia, titular del Ente Regulador, fue convocado a la Cámara de Diputados, para informar lo que se viene realizando desde el organismo. Además, se le pidió que detalle lo realizado respecto a la cuestionada facturación que despertó el reclamo de los usuarios.
En diálogo con Salta4400, Saravia aseveró que lograron quitar dudas sobre las repercusiones de la pandemia en el marco de la prestación de servicio público y la facturación. “Igualmente nos hemos comprometido a proseguir un trabajo con lo que es la legislatura para tratar distintos aspectos vinculados con régimen sancionatorio, de potencia tratada que tanto ha repercutido en los comercios y empresas. Pero la reunión fue muy afable, bien, un buen clima y sobre todo con mucho respeto que es lo importante”, reveló.
En este marco, el diputado Godoy expresó que “deberían haber venido a dar la cara la gente de Edesa”. Esta frase repercutió entre las autoridades. Por su parte, Saravia expresó que no tiene problemas con este dicho. “No estuvo en la reunión, han ido todos los presidentes de bloques y otros diputados más, pero siempre a disposición de informar. Sin prejuicio de ello la cámara esta en todo derecho de solicitar que venga quien quiera”, analizó.
Además, aclaró que el Ente tiene la obligación de contribuir en brindar todo contexto a efecto de que las decisiones que se adopten después, sean las acertadas. Asimismo, enfatizó que se trata de una situación extraordinaria por lo que las aclaraciones tienen un gran valor, para evitar terminar en alguna conclusión que no sea la adecuada.
Subsidios y otras soluciones en puerta
Sin muchas vueltas, Carlos Saravia dejó claro que las facturaciones en principio no han mostrado o evidenciado una irregularidad. “Ha habido una facturación estimada y corregida; la estimada es en muchos casos en menos y no una gravitación importante”, agregó. Asimismo, dejo claro que hubo un incremento en el consumo, también una incidencia. A ello, sumó el el incremento del impuesto inmobiliario por la municipalidad de Salta y también el incremento de enero, febrero y marzo del 35% de agua.
“Por otro lado ha habido una explicación sobre lo que es el cargo fijo con el que se cobra la potencia contratada”, subrayó. Para ello, el titular explicó lo que sucede actualmente con el agua ya que la mayoría de la gente no cuenta con medidor. “Esta discusión ha sido postergada durante 15 años cuando se quiso instaurar el sistema medido; hoy son muy pocos los que tienen medidor, la mayoría es por cargo fijo, por eso, en el caso de potencia contratada y de agua, le viene lo mismo en la boleta, con la misma suma económica”, profundizó.
Frente a ello, planteó la posibilidad de liberar a aquellos que están con el régimen de potencia contratada para reducirla. En segundo lugar, precisó que aquellos que tengan la posibilidad de instaurar un medidor lo hagan. “Entendemos que tenemos que tener un marco de soluciones que hacen mucho a la diligencia del empresario y los comerciantes”, enfatizó.
En términos técnicos, recordó que todo aquel que tiene potencia contratada y que ya ha superado los 12 meses, puede ir y reducirla. Mientras tanto, analizó que a los demás se los liberará siempre en un marco extraordinario, a los efectos que no sigan padeciendo estos efectos que se dan por la pandemia. Una vez más, el titular señaló que “las normas están hechas para una situación de normalidad”, no para contextos como éste en el que la situación se torna injusta.
“También está claro, que si a los usuarios más pobres, al sector vulnerable solamente se les ha dado el diferimiento y la garantía de no cortarles los servicios, entonces es incongruente que al sector del comercio le demos subsidio por esto. En este punto su entiendo que el más pobre tiene una prioridad y al menos la igualdad de trato tiene que imperar”, reflexionó Saravia.
Otro frente de batalla
Otras de las situaciones que emergieron con la crisis superando la capacidad de diálogo entre las autoridades, es la problemática sobre el suministro de agua. Se sabía que el Ente Regulador intervino en la solución de algunos problemas como tema pozos. Por su parte, desde Aguas del Norte indicaron que el Ente no puede intervenir. “La relación con aguas del norte es buena, aunque por supuesto genera algún tipo de incomodidad que nosotros pongamos en evidencia situaciones”, aclaró.
Saravia explicó que el Ente tiene 77582 usuarios con afecciones, es decir que el 25% de los usuarios han tenido problemas con el agua, por falta de agua un 36%, por perdida de agua 24%, por desborde cloacal 23%. Esto los ha llevado a formular estimaciones y disponer ordenes regulatorias para re establecer un servicio. “Una pérdida de agua tiene un límite de 12 horas para tener una solución. Nosotros tenemos problemas que abarcan en algunos casos meses”, admitió.
Por ello, al margen de las susceptibilidades, desde el Ente seguirán controlando, porque aunque sea estatal la empresa, “no tiene coronita”. “Nosotros tenemos que tratarlos a todos por igual, nos pagan para controlar. Cuando cambie la ley y nos digan que no tenemos que controlar, allí no diremos nada”, adelantó. Pero eso no fue todo, Saravia declaró que Aguas del Norte es una empresa con muchos problemas, “casi fundida”.
“Al Ente Regulador le debe 34 millones de pesos de tasas. Antes se entendía que el Ente era un árbitro entre la empresa y los usuarios. Yo tengo la concepción que es un defensor del usuario porque para ser árbitro yo tengo que tener dos equipos iguales. Si tengo una empresa que factura 4 mil millones al año frente a un usuario que gana 20 mil pesos por mes y apenas llega a pagar la casa, yo tengo que ir a equilibrar, no soy árbitro”.
Carlos Saravia – Titular del Ente Regulador de Servicios Públicos