(Por Diego Nofal) Si hablamos de relaciones tóxicas, la del PRO – Cambiemos y Gustavo Sáenz parece ser un ejemplo de manual. La semana pasada Alberto Castillo fue el primero en decir “esto es mío” al decir que el partido fundado por Mauricio Macri, había llevado al Gobernador a su puesto. Ayer el mandatario provincial, puso como ejemplo de superación de la grieta y de trabajo al diputado nacional Andrés Zottos, y el despecho de Martín Grande y Virginia Cornejo explotó en las redes sociales
“Me tocó gobernar, no digo con la más fea porque a veces es divertido bailar con la más fea. Lo triste es tener que bailar con alguien que no se conoce, que no se ve, que no sabemos qué quiere y hacia dónde nos lleva. Nos tocó a todos bailar con esta situación triste y dolorosa, de la que vamos a salir juntos, sin egoísmos, sin mezquindades, sin oportunismo, sin aprovechar el dolor de mucha gente para hacer política”, dijo el titular del Ejecutivo intentando aunar a todos los santiagueños bajo la misma bandera.
“Hoy no es tiempo de hacer política, la gente necesita soluciones, necesita vernos trabajar juntos. ¿De qué sirve seguir alimentando esa grieta, hablando del pasado, de lo que ya pasó? Cuando llega un gobierno se la pasa hablando mal del otro, y no hace nada y le echa la culpa al otro, y cuando llega otro gobierno se la pasa hablando mal del que se fue”, dijo en relación a la constante referencia de los funcionarios y diputados nacionales a la gestión macrista.
“Así estamos hace años en la Argentina. No soy amigo de los fundamentalismos, que si estás de un lado o estás del otro. Sino que siempre dije que tenemos que tener en claro qué es lo que queremos. Yo llegué a gobernador gracias a ustedes para todos los salteños, no para los que me votaron. No soy delegado nacional de nadie, soy gobernador de los salteños y tengo que defender los intereses. El general Perón decía ‘primero la patria, después el movimiento y por último los hombres’, y creo que era clarísimo el mensaje, o yo lo entiendo así”, señaló poniendo límites a la intención del macrismo de apropiarse de su gobierno.
Pero nada del discurso conciliador de Gustavo Sáenz, ablandó el corazón de los dos diputados nacionales de Cambiemos. Cual novio celoso no sólo despotricaron contra su “aliado” en Grand Bourg, sino contra el nuevo galán que acompaña a su ex amado. “Sr. Gobernador Gustavo Sáenz, si Andrés Zottos es para usted un ejemplo de diputado, porque votó a pedido suyo la amnistía para Cristóbal López, que robó y estafó a los argentinos por 10 mil millones de pesos, estamos orgullosos de no pertenecer a su dilecto grupo de obsecuentes”, tuitearon los parlamentarios al unísono.
