SALTA (Redacción) – Luego de varios meses de estar entre los 10 países más afectados por el coronavirus, Argentina pudo salir de esa triste lista. Según la Universidad de John Hopkins, encargada de contabilizar las cifras oficiales de la pandemia, el territorio nacional se encuentra en el puesto número 12 entre las jurisdicciones con más casos confirmados. Y con respecto a la cantidad de muertes, está en el onceavo puesto.
Hasta el momento, la pandemia ya provocó en el mundo 1.762.015 fallecimientos y 80.642.813 de casos confirmados. Hay muchos factores que influyeron en el drástico aumento de casos en países europeos o africanos, lo cual permitió que el territorio argentino pueda bajar en el ranking. Cabe destacar que hasta hace unas semanas, Europa atravesaba por la segunda ola de contagios y actualmente sufren por una nueva cepa del coronavirus.
Coronavirus en Argentina
El Ministerio de Salud, en su último informe epidemiológico, expresó que durante los últimos tres días se registraron en Argentina 187 muertes y 14.402 nuevos casos positivos de COVID-19. Con estos números, el total de fallecimientos asciende a 42.501, mientras que el total de infectados llega a los 1.578.267. La provincia donde más casos se registraron fue Buenos Aires.
Advertencias de las autoridades
Las autoridades sanitarias se mostraron preocupados por el relajamiento con respecto a las medidas sanitarias en esta nueva etapa de la cuarentena. Este comportamiento puso en riesgo la disminución de casos de coronavirus y provocó un «amesetamiento», con una tendencia al aumento en el número de los contagios. Es lo que pasó en el AMBA y lo que podría replicarse en todo el territorio argentino.
Por este motivo, solicitaron más responsabilidad por parte de la sociedad para evitar que la segunda ola llegue antes de lo previsto a Argentina. Según informaron los expertos, este tan temido capítulo de la pandemia podría llegar en otoño, por lo que buscan que la mayor parte de la sociedad esté vacunada para esa época. De esa forma, evitarían que pase lo mismo que en Europa, donde el número aumentó de manera drástica y descontrolada.