SALTA (Redacción) El Hospital Público Materno Infantil, aquel que fue elogiado el año pasado por ser “el mejor equipado de Latinoamérica” obteniendo el reconocimiento de la organización estadounidense Global Health Intelligence durante la pandemia, hoy se encuentra bajo un nuevo reto, la vacuna contra el virus respiratorio más aterrador para los niños y padres: la bronquiolitis. Hoy, el nosocomio se encuentra participando en la fase 3 de un estudio multicéntrico de una vacuna contra el virus causante de la bronquiolitis, Sincicial Respiratorio, que busca prevenir esta enfermedad en la población infantil.
El estudio está bajo la coordinación de Fernando Polak, Romina Libster y el Gonzalo Perez Marc de la Fundación INFANT. Por parte del hospital de niños, participan los investigadores Luis Navarro y Ana Tadeo y además del este sanatorio, participan también hospitales de la provincia de Buenos Aires, de Estados Unidos, Australia y Sudáfrica. Parte del equipo de investigación ya se realizó las visitas necesarias a las instalaciones del hospital a fin de coordinar los últimos detalles para la puesta en funcionamiento de la fase tres de la vacuna contra el virus Sincicial respiratorio (VSR), sea efectivo.
La primera actividad del estudio se inició con una reunión con el equipo directivo, responsables, jefes del nosocomio y ejecutivos del laboratorio quienes conversaron sobre los lineamientos a seguir respecto a la evolución de la investigación, posteriormente, la comitiva realizó un recorrido por las instalaciones a fin de supervisar y dar indicaciones a las áreas involucradas. Esta vacuna se aplicaría a mujeres sanas que estén cursando 24 a 36 semanas de embarazo y que tengan entre 18 y 49 años, posterior a que cumplan las condiciones establecidas por protocolo y que firmen el consentimiento informado donde manifiestan su voluntad para participar.
Por otro lado y no menos importante, se informó que se evaluará igualmente la seguridad y eficacia de la vacuna en bebés nacidos de las madres que recibieron las vacunas en comparación con los nacidos de madres que recibieron placebo. Y garantizan que los recién nacidos, van a recibir un seguimiento durante todo el primer año de vida del niño.
El objetivo central de esta vacuna, es que busca prevenir las formas más graves de bronquiolitis en menores de dos años. Estas enfermedades respiratorias pueden ser riesgosas para un niño de entre los 2 y 6 meses de vida mayormente. Por su parte, el director científico de INFANT, Fernando Polack, declaró que la bronquiolitis “es la principal causa de internación en niños menores de un año en nuestro país y un porcentaje de estos niños puede fallecer por esta enfermedad”. Del mismo modo agregó que “hace más de 50 años que se investiga para desarrollar esta vacuna y este año tenemos una oportunidad de evaluar si esta vacuna beneficiará a esta población o no”, culminó el investigador.
Cabe recordar que la bronquiolitis es una infección de las vías respiratorias bajas más pequeñas (bronquiolos), que se contagia por las gotitas que se producen al hablar, toser o estornudar. Además el virus puede quedarse sobre objetos y esto ayuda al contagio. No hay aún medicina para curar la infección. Se pueden tratar algunos síntomas y sus complicaciones. Suele ser suficiente con aplicar medidas para aliviar los síntomas y cuidados generales.
