SALTA (Redacción) – El malestar por parte de los profesionales de la salud de Salta data de hace un largo tiempo y se acrecentó con la pandemia. Muchos enfermeros y médicos denunciaron precarias condiciones laborales y problemas administrativos en los nosocomios donde prestan servicio. Esto último ocurrió en el hospital San Vicente de Paul, en Orán, donde una mujer se encadenó en los pasillos en reclamo por algunas irregularidades.
La mujer decidió llevar a cabo esta medida de fuerza para dar a conocer la situación que se vive dentro del centro médico. Asimismo, solicita la renuncia de la gerente del Hospital San Vicente de Paul, Dra. Gladis Laime y exige al Ministerio de Salud y su titular, Juan José Esteban, que investigue lo sucedido dentro del nosocomio. Según denunció, la profesional a cargo quitó puestos de trabajos para «acomodar» a su gente.
Esta situación se da en un marco de emergencia sanitaria que puso al sistema de salud de Orán en alerta roja. Durante el aumento de casos que comenzó a registrarse en Salta desde hace algunas semanas, trabajadores de la salud señalaron que en el nosocomio no cuenta con los recursos ni con el personal médico necesario para hacerle frente a la segunda ola de coronavirus.
A esto se le suma «el mal manejo de fondos» de la anterior gestión denunciado por los trabajadores del Hospital San Vicente de Paul. En ese sentido, analizan llevar esa denuncia social a la Justicia para que se inicien los trámites correspondientes por esta situación. De acuerdo a las declaraciones, la gerencia anterior se llevó «varios millones de deudas con los proveedores».
En busca de médicos
La falta de recursos no es lo único que encendió las luces de alarma en Orán. En la antesala de la segunda ola, los profesionales reclamaron que existe personal insuficiente para luchar contra el aumento de casos. Por este motivo, comenzaron a buscar más médicos para sumar a la nómina del nosocomio. Esta problemática no la atraviesa solamente esta localidad, sino todo el norte provincial.
