SALTA (Redacción) – La pequeña localidad de Tolar Grande, ubicada en la Puna salteña, tomó una inesperada medida al cerrar sus puertas a todas las personas que no estén vacunadas contra el coronavirus. En todo caso, los interesados en ingresar al pueblo debe presentar un test rápido o PCR negativo. Cabe remarcar que este pedido no rige en ningún otro distrito de Salta o incluso del país. Considerando que esto impediría la libre circulación cuando ya no existen restricciones sanitarias.
Esta determinación, del pueblo ubicado en el departamento Los Andes, se tomó mediante una resolución municipal avalada por el Comité Operativo de Emergencia (COE) local. El intendente de Tolar Grande, Sergio Villanueva, aseguró que dio aviso al COE provincial y que lo autorizaron. Así también lo habilitó el Concejo Deliberante de este distrito. En este sentido, el jefe comunal aseguró que se debe a la distancia que hay con los hospitales más importantes.
La mayoría ya recibió vacuna
En tanto, el intendente también remarcó que esta restricción sanitaria se instaló porque saben que la mayoría de las personas ya recibió la vacuna contra el covid-19. Por lo que espera que el pedido no genere mayores complicaciones. Cabe mencionar que este pueblo se encuentra sobre la ruta provincial 27 y se desarrolló a la vera del Ferrocarril Belgrano, en el ramal C 14 que cruza a Chile por el Paso Internacional de Socomp.
Un dato a tener en cuenta es que Tolar Grande solo tiene solo tres concejales y dos de ellos ratificaron que la decisión se tomó en conjunto y la respaldan todos los habitantes. «Dimos el visto bueno porque tiene que ver con el cuidado de nuestra gente”, aseguró la edil Gabriela Cruz. «A la entrada controla la policía y pide esos papeles, el que no los tiene no puede pasar”, apuntó.
“Todos estuvimos de acuerdo. Porque es la única forma de abrir el pueblo a los turistas y viajeros, para que estemos controlados”, completó la concejal Graciela Soriano. De esta manera, también defendió la resolución inédita para el país y detalló que la resolución se dictó el primero de septiembre. “Para permitir que lleguen turistas, que vienen con la reserva y ya avisados que tienen que traer el carnet o el test negativo”, completó.